Monterrey, Nuevo León.-
Pasaron 10 años para que el poeta José Javier Villarreal terminara “Los secretos engarces”, un libro en el que revela sus recuerdos y sus experiencias en general dentro de la literatura.
“De pronto hay un personaje que está en primera persona, que va a lo largo del libro, que se va refugiando en otros personajes. Es una galería de personajes que aparecen, desaparecen, vuelven.
“(Los secretos …) No es un libro que se hizo pronto, porque empieza a redactarse en 2010, se hacen otros libros a la par, que se convierten en ramas de ese libro, y en mis mejores sueños he fantaseado con que estamos ante una novela; es decir, que los ensayos podrían ser capítulos”, expresó Villarreal, en la presentación que se realizó ayer de manera virtual vía Facebook de Cultura UANL en el marco del Festival Alfonsino 2021.
Mencionó que hay un primer capítulo donde hay un niño que al llegar a la etapa adolescente descubre el mundo; y en un siguiente capítulo lo vemos con los padres, Baja California e Higueras, Nuevo León.
“Y luego vuelve el niño a una tradición donde están los abuelos, donde está Pitol, que a mí se me hizo genial. Creo para un texto literario es fallido, es decir ¿cómo te vas a encontrar en Tecate a Juan Soriano y a Sergio Pitlol? nadie te lo va creer, pero fue cierto.
“Y a partir de eso que no funciona como literatura, porque no es verosímil pero es verdadero, empezar a tejer historias”, dijo el ganador del Premio Nacional de Poesía Aguascalientes 1987 por Mar del Norte.
“Los secretos engarces” editado por Textofilia y la UANL contiene poemas, textos humorísticos, ensayos, que durante una década el autor fue trabajando con paciencia.
“Hubo tiempo para ir tejiendo. se dio una labor de Penélope; cada vez destejía menos, y tejía más -no era mi intención que llegara Ulises- pero lo que sí llegó fue toda una memoria, una historia donde veo que la literatura es un acontecimiento vivo como conocer a alguien o perder a alguien.
“Y también hay una nostalgia. En el libro hay una plena certeza que un tiempo se ha acabado y no quiere decir que no esté, el paraíso está, pero ya no puedo regresar a eso, entonces, surge la necesidad de invocar y plasmar ese tiempo que se nos ha ido”, señaló el director de la Capilla Alfonsina Biblioteca Universitaria.
Por su parte Antonio Ramos Revillas, director de editorial universitaria consideró que “Los secretos engarces” es un libro luminoso con el que el lector va a mirar el mundo de otra manera.
“Una vez que terminas de leer este libro empiezas a darte cuenta de la posibilidad de cómo unir las raíces. Es decir, cuando levantas el césped, no levantas una hoja, levantas toda una ristra, todo está entramado y en este libro también: hay poesía , hay crónica, hay reflexión, hay ensayo”, apuntó.
Y el editor Ricardo Sánchez – Riancho comentó que todo el libro es una sucesión de pequeños eslabones y de pequeñas uniones entre lo íntimo, los recuerdos y que también habla de la nostalgia de la ciudad y del paso del tiempo.
“Se ha ido trazando un camino que de alguna forma me atrevo decir que en este libro se ve trabajado de un modo mucho más moderno, porque por detrás se ve que hay un conocimiento histórico de formas y géneros ; y a la vez, dándonos algo diferente.