Lázaro Cárdenas, Mich. / Oct. 25
La aparición de una hielera con un mensaje amenazante, conteniendo en su interior una cabeza humana que según las primeras investigaciones ministeriales tenía poco tiempo de haber sido cercenada del cuerpo de la víctima, provocó la movilización de diferentes cuerpos policiacos, así como de elementos del Ejército mexicano y la Armada de México.
Una llamada realizada en forma anónima a la guardia de la Policía municipal, indicó que cerca de las 07:00 de la mañana, unos desconocidos habían dejado una hielera con una cartulina fluorescente, a unos dos metros de la entrada principal del motel La Isla, ubicado sobre la carretera que comunica a la ciudad con la zona industrial de la Isla del Cayacal y la autopista a Morelia.
Al lugar además de la policía municipal, acudieron soldados del 82 Batallón de Infantería del Ejército mexicano e infantes de Marina de la Décima Zona Naval, en donde los militares, luego de scanear con un sofisticado aparato la hielera, determinaron que no contenía ningún explosivo, pero si marcaba que había en su interior restos humanos.
Una vez que arribó el Agente del Ministerio Público del fuero común, acompañado de peritos en criminalística, se procedió a abrir la hielera, en cuyo interior estaba boca abajo una cabeza humana, en medio de hielos y sangre, la cual estaba cubierta con cinta gris y solamente se alcanzaba a ver el cabello negro lacio de la víctima.
El Ministerio Público ordenó que la hielera conteniendo la cabeza humana fuera enviada al servicio médico forense para los estudios correspondientes, pues de momento quedó en calidad de “desconocido”.
El “narcomensaje” estaba escrito a mano, en una cartulina verde fluorescente, en donde se hacía alusión a los atentados con granada del pasado 15 de septiembre en Morelia, firmado por el Cartel del Golfo, en donde se deslindan de esos hechos.
El pasado 8 de octubre apareció colgada unos cuantos minutos, de un puente peatonal, cerca del aeropuerto local, una manta también con un mensaje del mismo grupo, rechazando ser los autores de los hechos sangrientos de la noche del Grito en la capital michoacana.