Zoológico de Guadalajara resguardará
a animales decomisados a narcos

México, D.F. / Oct. 30
A partir de este jueves la pareja de leones, la de jaguares negros y de tigres en peligro de extinción, así como el mono macaco cola de moñón se despedirán de la vida de lujos, basta comida y atención personalizada. Pasarán de la vida privada a la pública una vez que comiencen a ser exhibidos en el Zoológico de Guadalajara, como muchos otros animales en cautiverio.
Un operativo policiaco realizado el pasado 17 de octubre en una residencia de Desierto de los Leones, que derivó en la captura 15 presuntos integrantes de una célula dedicada a abastecer de cocaína colombiana al cártel de los Beltrán Leyva, les vino a cambiar la vida.
Desde hoy dejarán de ser parte de la vida ostentosa de particulares y testigos de fiestas o encuentros, en donde pudiera haber habido importantes narcotraficantes, en la casona.
Procedentes de África, y en el caso de la pareja de jaguares negros de América, los siete animales seguirán recibiendo buena atención, pero no tan especial como la que tenían en el que desde hoy dejará de ser su hogar.
De acuerdo con personal de la Unidad Canina de la Policía Federal Preventiva (PFP) y del veterinario independiente Miguel Peña, los mamíferos fueron encontrados en perfectas condiciones. Y de hecho, estaban sobre alimentados, por lo que se les cambió la dieta. Su comida fue reducida. Los especialistas estimaron que se erogaba en su alimentación hasta más de cuatro mil pesos diarios. Después del operativo el gasto se redujo a unos tres mil.
Era una sola persona la encargada de cuidarlos pero, por seguridad para la investigación, las autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) se reservan la información al respecto.
Jaime López de López, uno de los elementos de la Unidad Canina de la PFP que tuvieron que acudir a la atención de los felinos, aún sin experiencia en el cuidado de este tipo de animales, comentó que éstos estaban bien tratados y eran óptimas las condiciones de las jaulas donde permanecían.
Tal es el caso de los tigres blancos que podían ser observados también desde un jacuzzi a través de un tragaluz que formaba parte de un espacio que simulaba una caverna dentro de la mansión del kilómetro 30 del camino al Desierto de los Leones.
Información de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UINC), de la cual México es parte, señala que la pareja de antera Tigris, es de una especie cuyo estatus es “en peligro de extinción” y en consecuencia, su tendencia de población es decreciente.
Se estima que existe una población mundial de entre tres mil y cinco mil de estos tigres, que llegan a pesar entre 200 y 360 kilogramos y medir entre 1.5 y 3 metros de largo y uno de alzada, sin contar la cola, que agregaría un metro más en promedio.
En tanto, el jaguar negro es catalogado en México como en peligro de extinción. Llegan a vivir entre 20 y 25 años; medir entre 1.1 y 1.85 metros y 80 centímetros de altura, así como pesar entre 57 y 113 kilogramos. Posee la estructura mandibular más poderosa de entre los felinos y el mayor peso relativo de la cabeza, lo que le proporciona su perfil característico.
Los leones alcanzan a medir 3.3 metros de longitud, incluyendo la cola que puede medir un metro de largo. Logran una altura en los hombros de 1.2 metros y un peso promedio de 180 kilogramos.