Zapopan, Jal. / Nov. 1
Ojos de tecolote, nerviosismo de arquero, una playera azul, saliva de un ‘pelado’… El hechizo ha resultado para el América, que ha vuelto a ganar en el Apertura en plena noche de brujas.
Dulce o travesura. Enrique Esqueda y Rafael Márquez, quienes se han disfrazado de fantasmas la temporada entera, salieron rabiosos a la caza del emplumado rival, único equipo que ha perdido los dos partidos frente a las Águilas en el peor año de su historia. Salvador Cabañas cerraría la cuenta: 3-1.
No es de siempre que los tecolotes acompañan a la mala suerte. Algunas brujas les utilizan para levantar a los muertos en conjuros de la noche. Las viejas sombrerudas de verrugas en la nariz estuvieron sueltas en el Tres de marzo, le hicieron el favorcito a Ramón “Pelado” Díaz.
No hay luna en Zapopan. Ha desaparecido después de la mezcolanza las brujas que ha revivido las esperanzas americanistas.
Ismael Rodríguez pudo adelantar a la visita, fue el primer aviso. Pero el cabezazo del defensor amarillo salió directo a la posición del meta Corona y nada, que cuatro minutos después, Domínguez salió con una travesura en el área defendida por Guillermo Ochoa. Penalti en contra del América. El Pelado Díaz se quería morir en la banca. No encontraba forma alguna para no derramar bilis por una más de las equivocaciones de su compatriota, a quien no hay pócima que le ayude le ayude.
Robert de Pinho fue el encargado de ejecutar desde el manchón. El lance de Ochoa fue al lugar, mas el esfuerzo del arquero americanista fue inútil. Así ha sido desde hace meses. La anotación cayó en gran momento para los Tecolotes, quienes habían perdido al elemento más rapaz del grupo: Rodrigo Ruiz, quien salió con una molestia muscular en el muslo derecho.
Enrique Esqueda, disfrazado de fantasma la temporada entera, salió con la travesura de la noche. Federico Insúa sacó un dulce de servicio que se comió Corona en la salida. El 21 americanista se encontró con el balón que milagrosamente terminó en gol (minuto 49). Así es Esqueda, luego fallaría una clara de frente al marco y sería defendido por el “Pelado” de los abucheos tras salir de cambio por Alfredo Moreno. Mientras, Miguel Herrera salió con cara de chamuco, incrédulo luego del error de Corona.
Pero vendría más, las Águilas ganarían el duelo de aves carroñeras. Y cuando las brujerías parecían no ser suficientes se vino un error del silbante Armando Archundia. El segundo tanto del América se originó precedido de un tiro de esquina que el árbitro no señaló a disparo de Rafael Medina desviado por la defensa. En esa jugada, Márquez aprovechó para marcar el segundo tanto (minuto 87). Cabañas (minuto 90) cerró la cuenta. El hechizo ha resultado para el América, que se aferra a salir de las sombras.
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