Monterrey, N.L. / Septiembre 21.-
El cardenal de Nuevo León, Francisco Robles Ortega, aseguró que la comunidad católica en México apoyaría la propuesta fiscal para el 2010, que pretende crear nuevos impuestos, si el presidente Felipe Calderón garantiza que esos recursos se van a utilizar para ayudar a los más pobres y no para aumentar la burocracia en el gobierno.
El 8 de septiembre, el ejecutivo federal envió a la Cámara de Diputados el paquete económico para el 2010, en el cual se propone la creación de un impuesto de 2% al consumo -incluye alimentos y medicinas-, otro de 4% a telecomunicaciones, así como el incremento del Impuesto Sobre la Renta, de 28% a 30%, y un aumento en el gravamen a tabaco, cerveza y sorteos, con la finalidad de implementar programas emergentes de apoyo social.
En este sentido, el arzobispo de Monterrey aseguró que la ciudadanía está en la plena convicción de que se requiere ser solidarios con los más pobres, y para ello el gobierno requiere de más ingresos.
“Creo que si se hace necesario que el gobierno se allegue más fondos sobre todo cuando se dice que es para atender al tema de la pobreza, si es así, creo que hay un mayor consenso, el ser solidarios con los más golpeados y con lo más pobres de la sociedad”.
Robles Ortega abundó que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público debería contemplar esquemas para ampliar la base gravable y que el peso de los impuestos no sólo recaiga sobre los contribuyentes cautivos.
“Lo que hace falta es diversificar más el grupo que aporta estos impuestos, porque el grupo que ya está registrado tiene muchas demandas de impuestos y ahí es donde bien el desacuerdo, donde viene la incomodidad”.
El representante de la comunidad católica de Nuevo León enfatizó que otro acierto del gobierno seria disminuir la informalidad y sobre todo establecer reglas claras en la aplicación del erario público.
“El gobierno debiera buscar ampliar el número de personas que están sin contribuir y que deben de contribuir y que se garantice que efectivamente eso se va aplicar en programa para combatir la pobreza, que no se va a dedicar esto a fortalecer y engrosar el aparato administrativo.
-¿Debería apretarse el cinto el gobierno federal?
– Desde luego, y dice estarlo haciendo.
La semana pasada, el gobernador de Nuevo León, Natividad González Parás, y representantes de la Cámara de la Industria de la Transformación (CAINTRA) y de la Confederación Patronal de la Republica Mexicana se manifestaron en contra de la creación de nuevos impuestos, tal como lo plantea el proyecto económico para el 2010 del gobierno federal.
El titular del ejecutivo nuevoleonés abundó que México presenta un grave déficit en la recaudación de impuestos a comparación de otras naciones del mundo, “pero hay que buscar cuál es el mecanismo y la fórmula adecuada para no dañar a las clases populares, y para no dañar a la competitividad del país”, como lo harían estos nuevos gravámenes, propuestos por la federación.
En este sentido coincidieron los presidentes de la Coparmex y de la Caintra, respectivamente, Marcelo Canales y Andrés Garza quienes por separado, aseguraron que la creación de nuevos impuestos “frenan la competitividad de las empresas que ya están en el país y ahuyentan la inversiones”.
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