México, D.F.-
La fórmula de éxito de la película No se aceptan devoluciones ha sido una combinación de factores que ha dado un resultado histórico: 10 millones de espectadores alcanzados ayer jueves en México, la cifra más alta de un filme de origen nacional.
La clave fue una fuerte campaña de promoción que incluyó redes sociales, su estreno primero en Estados Unidos y el apoyo de una potente distribuidora como Videocine, que la lanzó con mil 500 copias en el país.
La compañía decidió estrenar la cinta primero en Estados Unidos, donde, según el mismo Derbez, el público latino le quiere más que su propio país. Dos semanas después llegó a tierra azteca.
“Yo sé que no tengo el nombre de Salma Hayek como para que un estadounidense venga a verme, pero los latinos, los mexicanos, sí me reconocen y me quieren”, comentó el actor y director a EL UNIVERSAL durante los primeros días de promoción.
En Estados Unidos hay poco más de 50 millones de hispanos, y un porcentaje de ellos acudió a las más de mil salas y casi 60 ciudades que ya proyectan Instructions not inclued. En un principio la cinta del cómico estrenó con 348 salas en el país vecino. Mediante las redes sociales, el director invitó a sus compatriotas a acudir a las matinés que suelen ser más baratas que las funciones vespertinas.
El resultado: más de 38 millones de dólares acumulados en la taquilla estadounidense hasta ahora.
La promoción en Facebook y Twitter también incluyó automemes, en donde las escenas de la película circulaban con varios chistes y burlas, muy al estilo del cómico mexicano, además de que Derbez decidió responder a sus seguidores todos los comentarios recibidos en redes sociales.
Además de este bombardeo, al que más de tres millones de seguidores del actor, tan sólo en Facebook, estaban expuestos, Eugenio Derbez estuvo dispuesto a estar hasta en la sopa. No hubo canal de televisión, estación de radio, periódico y hasta videoblogs, como Werevertumorro, en el que el cineasta no estuviera.
Durante una entrevista con Alejandro Franco, en W Radio, comentó que su jornada de promoción comenzaba desde las cuatro de la mañana, momento en el que se preparaba para estar en los matutinos de Estados Unidos, además de Sábado Gigante, El show de Jimmy Fallon y hasta Larry King.
En México, Derbez también recorrió todos los medios de comunicación para promover lo que significó su debut como director.
El actor recurrió además a una comedia que tocó al público y que ha sido definida como “conmovedora”, aunque este elemento no fuera suficiente para nominarla al Oscar.
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