Además de las altas tasas de interés que deben pagar los clientes por la tarjeta de crédito, a este producto se suman otros costos. Algunos bancos “atan” a los plásticos cargos adicionales por seguros de vida, que encarecen la mensualidad en más de 100 pesos.
Por lo general, la suma asegurada oscila entre 300 mil y 500 mil pesos y las pólizas pueden ser de vida o contra accidentes.
Héctor Carreón Aldana, director de información y estadística de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), advirtió que este pago “extra” es una de las principales causas de inconformidad en los tarjetahabientes, y cuando éstos pretenden cancelar el seguro, el procedimiento se convierte argo, complicado y engorroso. El funcionario advirtió que algunos ejecutivos aprovechan la colocación de tarjeta “y entre la confusión venden el seguro de vida”. Incluso hay grupos financieros que no consultan al cliente, y ante cualquier descuido le agregan la póliza.
En lo que va del año, la Condusef recibió 4 mil 602 quejas, mientras que en 2007 las inconformidades ascendieron a 4 mil 312. Carreón Aldana reconoció que, si bien hay un mayor interés de las aseguradoras por entender lo que el cliente necesita, todavía falta avanzar para mejorar las condiciones de las pólizas.
La conciliación es de 25%, pero la cifra aumentará cuando las firmas se sumen al proceso de gestión electrónica. Recomendó a los tarjetahabientes revisar con detalle su estado de cuenta y preguntar si con el plástico se incluye una póliza de vida.
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