México, D.F. / Nov. 15
Los principales polos del PRD, Izquierda Unida y Nueva Izquierda, iniciaron negociaciones formales en busca de concretar un acuerdo interno que permita salvar la unidad de este organismo político de cara a la elección federal de 2009.
El Comité Técnico Electoral del partido entregó a Jesús Ortega, por orden del Tribunal Electoral de la Federación, la constancia de mayoría que lo acredita como nuevo presidente del perredismo nacional y de inmediato Alejandro Encinas canceló cualquier reunión conjunta.
Pero por la tarde, Jesús Zambrano y Ricardo Ruiz, coordinadores respectivos de los polos de Nueva Izquierda y de Izquierda Unida, instalaron una mesa de diálogo a fin de determinar los espacios en los órganos de dirección que corresponderán a cada grupo.
La agenda que abordan tiene tres ejes clave: Distribución de espacios en los órganos de poder, la definición conjunta de una estrategia electoral hacia 2009 y la asignación de candidaturas.
El primer círculo encinista detalló a EL UNIVERSAL que Encinas esperará al desarrollo de las negociaciones para fijar una posición, que mantiene la negativa a recibir la constancia de mayoría y que incluso podría cederse el espacio a Hortensia Aragón, compañera de formula de Ortega Martínez.
Nueva Izquierda, bajo la dirección de Ortega y Zambrano, mantiene inflexible su posición de controlar 70% de espacios y candidaturas, en tanto que Izquierda Unida, de grupos fieles a Andrés Manuel López Obrador y Alejandro Encinas, busca que el reparto sea 50% para cada polo.
Los escenarios que se presentan bajo la nueva correlación de fuerzas internas daría a Nueva Izquierda nueve secretarias y seis a Izquierda Unida, en el mejor de los casos, pero se mantiene con mayor posibilidad de 10 a cinco, además de que “Los Chuchos” lograría mayoría en el Comité Político y mayoría calificada en el nuevo Consejo Nacional del partido.
Mientras que el presidente del Comité Técnico Electoral, Iván Testa, notificó a la oficina de Alejandro Encinas que estaba lista la constancia que lo acredita como Secretario General del partido, el candidato perdedor rechazó recibirla y esperará hasta la próxima semana para fijar posición.
El ala más radical del partido, representada en Gerardo Fernández Noroña, llamó a pensar con seriedad en una escisión.
Tras recibir la constancia de mayoría Jesús Ortega asentó: “Yo soy el presidente nacional del PRD” y canceló cualquier posibilidad de dimitir a la dirigencia perredista a fin de consolidar un acuerdo político como lo demanda la Izquierda Unida de Encinas.
El aguascalentense llamó a Alejandro Encinas y a sus seguidores a trabajar en unidad desde el interior del PRD por el bien del país y anunció que buscará a los dirigentes nacionales del PT y Convergencia en busca de la alianza electoral del 2009.
“Le daré vuelta al capítulo del conflicto y las querellas internas, si alguien quiere ahondar en la confrontación no caeré y se enfrentarán a rounds de sombra”, puntualizó. Recalcó no tener ningún problema en reunirse con Andrés Manuel López Obrador.
Mientras, la gobernadora de Zacatecas, Amalia García Medina, ex presidenta nacional del PRD, dijo que espera que tanto Jesús Ortega como Alejandro Encinas “trabajen juntos de manera respetuosa y con altura de miras”.
“Jesús Ortega es mi amigo y le tengo una gran estimación igual que a Alejandro Encinas”, soltó. Pero el senador Tomás Torres –personaje cercano a Ricardo Monreal– consideró que se debe acatar la sentencia del Tribunal Electoral, porque es un organismo que está conformado por los representantes que el mismo PRD aprobó en su integración.
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