México, D.F. / Noviembre 18.-
La aplicación de la vacuna de la influenza A H1N1 comenzará el 23 de noviembre, y entre los primeros grupos a los que se les pondrá será a los enfermos con VIH-Sida debido a que tienen sus defensas bajas y son más vulnerables a contagiarse de influenza estacional y de la humana, informó José Antonio Izazola, director del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH Sida (Censida).
Recordó que el primer lote de vacunas será aplicado a personal médico y mujeres embarazadas, así como se tratará que también se comience con las personas que tienen VIH.
El director de Censida dijo que esta nueva vacuna se está recomendando para las personas que viven con VIH, además de la vacuna estacional contra la influenza.
Recordó que la vacunación para las personas con VIH, está contemplado en el programa nacional de respuesta ante A H1N1, por lo que son una población prioritaria.
“Estaremos desplegando una rápida respuesta a la brevedad posible”, mencionó, a la vez que dijo: “no sabemos en este instante la logística, pero es posible que la iniciemos el 23 en los Centros de Atención Ambulatoria y Prevención sobre SIDA e ITS (Infecciones de Transmisión Sexual) en cada estado”.
En las entidades, agregó, también podrán tener adicionalmente las medidas para hacer la vacunación en los hospitales. Incluso, adelantó que la nueva vacuna podría ser aplicada durante la realización del Décimo Primer Congreso Nacional sobre VIH-Sida, y otras infecciones de transmisión sexual, que se va a realizar en Tuxtla Gutiérrez, del 27 al 30 de noviembre.
Hizo hincapié que en este evento se tomarán todas las medidas sanitarias posibles para limitar la transmisión del virus de la influenza A H1N1, sobre todo para proteger a las personas que viven con VIH que representan uno de los sectores más vulnerables de la población.
En torno a los retos en materia de VIH-Sida, reconoció que aún falta mejorar la calidad de la atención. “Aún tenemos diagnósticos tardíos que no se benefician en su salud tanto como si hubieran iniciado su tratamiento cuando todavía no progresaba la enfermedad”, reconoció.
En cuánto a la criminalización del Sida, el funcionario dijo que desafortunadamente entre ocho y 12 entidades federativas están discutiendo la posibilidad de modificar las legislaturas locales. “Lo que tenemos que hacer es asegurar que está legislación nueva no sea perjudicial. Es decir, que no busque que cualquier persona que viva con VIH sea penalizado, sino que tome todas las medidas preventivas para no transmitir el VIH y solamente si es intencional y dolosa que tenga un castigo”, expuso.
La epidemia en México –sostuvo- sigue estando fundamentalmente en hombres. Aproximadamente 80 por ciento de las personas que viven con VIH, son hombres; 20 por ciento son mujeres. Una parte importante de estas mujeres son amas de casa.
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