Reynosa, Tamps./ Diciembre 30.-
Para muchas familias una buena cena el 31 de diciembre es importante porque demuestra la abundancia con la que se quiere recibir al año nuevo
Para Dora Padilla, residente de la ciudad, año con año se reúne con su familia para festejar esta fecha elaborando los tradicionales tamales, menudo y pozole.
“Hago menudo y botanitas, todo lo que se pueda comer; ya estamos listos para estar en familia festejando, venimos al mercado para comprar las hojas para hacer tambien tamales”, comentó.
La señora Padilla gasta en la cena de fin de año alrededor de mil pesos y a pesar de la crisis economica trata de pasarla bien con sus seres queridos.
“Generalmente gasto como unos mil pesos yo creo, y a pesar de la crisis económica hace uno el esfuerzo para pasarla bien, sin importar el gasto”, aseguró.
Pero no para todos hay abundancia el último dia de año, hay quienes la pasan muy dificil por la falta de solvencia econóimica
“Siempre hacemos cena, aunque este año está muy difícil, no va haber dinero, vamos a ver que podemos tener”, dijo Rafaela Montelongo.
Pese a ello, Montelongo tiene la esperanza de cenar pavo este 31 de diciembre en compañía de su hija y su nieta menor.
“Mi nuera quedó de mandarme un pavito para cenar con mi nieta, pero veremos (si se puede), si no se puede hacer aunque sea un menudito para convivir con mis hijos”, señaló afligida.
Lo que sí es un común denominador, es que para recibir al año no pueden faltar las tradicionales 12 uvas, aunque a decir de Enrique Cruz Hernández, encargado de una frutería, ésta incrementó también su precio hasta en un 30 por ciento.
“Ahorita se acaba de incrementar porque el precio estaba más estable, oscilaba en los 40 pesos, pero ya subió a 70 el kilo”, destacó.
Con uvas o sin ellas, con pavo o no, lo más importante es hacer el propósito de cada año ser mejores personas, dijo.