Reynosa, Tamps.-
La regidora del municipio de Reynosa Martha Josefina McDonald Chávez, nuevamente se salvó de un presunto ataque, luego de que una persona intentó ingresar a su cuarto del hospital donde convalece de las heridas de bala que recibió tras una agresión armada en la carretera San Fernando-Ciudad Victoria.
Autoridades de justicia reportaron que la tarde del sábado una persona que se identificó como reportero, intentó ingresar al cuarto del hospital donde convalece la regidora y su hijo, pero al no traer grabadora ni cámara, y si al parecer un arma de fuego, fue encarado por familiares y se dio a la fuga.
La funcionaria priista del Cabildo de Reynosa, junto con su hijo y un secretario, fueron atacados la mañana del pasado jueves sobre la carretera Reynosa-Ciudad Victoria, a la altura de San Fernando por un grupo de hombres armados que intentaban detener la marcha de la camioneta todo terreno en la que se desplazaban la regidora.
A ciencia cierta no se determina oficialmente si la decisión de escapar fue de McDonald Chávez o de alguien más, esto tuvo como consecuencia disparos de armas largas de sus persecutores, tal vez asaltantes.
Una vez a salvo y dentro de una clínica en San Fernando, Tamaulipas, por gestión del presidente municipal de Reynosa, un helicóptero de Petróleos Mexicanos los traslado a esta frontera, ingresaron a un hospital privado.
Cuando todo parecía llevar un ritmo normal tras los hechos en la carretera. La familia Mc Donald y demás allegados dieron la voz de alerta el sábado alrededor de las 17:00 horas, cuando un hombre de unos 40 años, complexión media, moreno de pelo canoso trató de llegar a la habitación de la regidora McDonald.
En el pasillo los parientes de la funcionaria le impidieron el paso y al mismo tiempo lo interrogaron, el hombre se identificó como reportero, solicitaba saber si la regidora usaría el suceso como plataforma política.
“No traía cámara de fotos o video, ni maleta de esas que usan los periodistas, solo se sorprendió cuando le preguntamos que buscaba, pero iba derechito al cuarto de Martita, no sabemos quién era, pero se le veía un bulto en la cintura”, dijo una de las familiares de la regidora.
“Al ver que éramos muchas personas la persona huyó del hospital, no lo pudimos detener”, agregó.
Ante lo extraño del caso del supuesto reportero, el Ayuntamiento decidió instalar vigilancia policiaca dentro y fuera del centro de especialidades médicas, inclusive con agentes encubiertos, a los que se les unieron efectivos de la Procuraduría General de Justicia.
Los videos del circuito de seguridad del Hospital son analizados por peritos especializados de la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas.
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