Las Vegas, E.U.-
Pelear en la mítica Arena del MGM Grand Garden suele ser sinónimo de éxito para Saúl Álvarez (56-1-2, 38 KO’s), aunque ese icónico sitio también le trae un recuerdo amargo.
La de este sábado frente al estadounidense Caleb Plant (21-0, 12 KO’s), en la que el “Canelo” buscará proclamarse monarca absoluto de los supermedianos, será la octava pelea del mexicano en ese sitio (primera en dos años), y casi siempre ha salido con la mano en alto… Salvo aquella amarga noche contra Floyd Mayweather Jr.
La primera vez que Álvarez boxeó en la Arena del MGM Grand Garden fue el 1 de mayo de 2010. Aquella vez, noqueó en nueve rounds al puertorriqueño José Miguel Cotto, para retener el cetro superwelter de la Federación Norteamericana de Boxeo.
Volvió más pugil para el 5 de mayo de 2012, día en el que derrotó por decisión unánime al estadounidense Shane Mosley, para defender exitosamente el título superwelter del Consejo Mundial de Boxeo.
El 15 de septiembre de ese año celebró las fiestas patrias en ese recinto con otra defensa del fajín superwelter del CMB, al noquear en cinco episodios al estadounidense Josesito López.
Ese cetro lo perdió al año siguiente, al caer con “Money” Mayweather (su única derrota como profesional), por decisión mayoritaria.
Regresó el 8 de marzo de 2014, cuando noqueó en 10 rounds al también mexicano Alfredo “Perro” Angulo.
El 12 de julio de ese año se impuso al cubano Erislandy Lara, para continuar su ascenso.
La aparición de la moderna Arena T-Mobile, la cual es considerada su casa, quitó protagonismo al Grand Garden, pero Álvarez volvió el 2 de noviembre de 2019, cuando se impuso en 11 episodios al ruso Sergey Kovalev, con lo que se adjudicó el cinturón semipesado de la Organización Mundial de Boxeo.
Ahora, en la época post pandémica, “Canelo” vuelve a la meca del pugilismo, donde buscará ser el primer monarca indiscutido en la historia.