Monterrey, N.L.-
Las sonrisas, las caras de sorpresa de niños y grandes, la emoción por reencontrarse con una actividad presencial fueron factores que contribuyeron para hacer que esta Pascua fuera de encanto en Niños Conarte.
Al llamado del Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León para hacer de esta Semana Santa un tiempo para compartir en familia y disfrutar de su oferta, ayer acudieron chicos y grandes al espacio dedicado a la infancia para hacer de la Pascua el motor de la diversión y el encuentro juguetón entre generaciones.
A través del juego, los pequeños y sus papás hicieron que la celebración de la Pascua fuera única y dinámica al participar en Largas orejas y libros. Todo cabe en un huevito haciéndolo acomodar.
En un formato de circuito, la asistencia tuvo a su alcance una jornada en la que se incluyeron la narración de cuentos, lecturas en voz alta, la creación de un texto poético en familia, y por supuesto, la búsqueda de huevitos de Pascua en los jardines aledaños al espacio Niños Conarte.
El objetivo fue acercar a niños y niñas a actividades de esparcimiento cultural y de integración familiar como parte esencial de su desarrollo, con el apoyo del grupo de mediadores del centro cultural.
Ahora que la pandemia ha dado una tregua y se anuncia que en Conarte se está con #LACULTURAAL100, las familias pasaron una jornada dominical lleno de regocijo e incluso gastronómico, porque no faltaron las golosinas y el buen humor.
