Dos fiscales removidos de sus cargos…
Varios de mis colegas tachados de “malos periodistas”…
El Fiscal General señalado de inepto…
El Palacio de Gobierno vandalizado….
Las amigas exhibidas como amigas nefastas…
El taxista lleno de remordimiento y angustia…
El padre de la víctima tachado de ser mal padre…
La víctima etiquetada de ebria y agresiva….
Sean o no sean ciertas todas estas cosas convertidas en un circo mediático… Lo único que sabemos es que no sabemos nada.
Y todavía no sabemos si hay o no hay un culpable…Solo salpicaduras de “merde”. (Pardon my french)