Ciudad Victoria, Tam.-
Desesperada y sin poder contener el llanto, una empleada universitaria acudió ante el Congreso del Estado para denunciar la presunta protección que las autoridades de justicia le otorgan a su esposo, quien intentó asesinarla el pasado 13 de septiembre.
“Soy Ericka Vidal. La próxima víctima. A punto de ser una más. ¿Qué esperan?”, escribió en una carpeta, en la que además anexo una fotografía con el rostro bañado en sangre, y que portó a su llegada a la sede del Poder Legislativo, donde fue atendida por las diputadas, Alejandra Cárdenas Castillejos y Leticia Vargas Álvarez.
Narró que, la noche del 13 de septiembre, su esposo la agredió brutalmente a golpes en su domicilio, en Altamira. Pidió el auxilio de la Policía, pero los agentes no quisieron entrar porque no les enseñó las escrituras para probarles que era la dueña del inmueble.
“No quisieron entrar porque no traía las escrituras de la casa y por eso no lo podían detener. Les lloré. No podía ver de tanta sangre que traía en mi cara, pero ni así me quisieron ayudar”, explicó.
Dijo que estuvo hasta las 02 horas de la madrugada, del 14 de septiembre, afuera de las oficinas de la Fiscalía General de Justicia del Estado, en Altamira, esperando un agente del Ministerio Público llegara a tomarle la denuncia.
“Esa es la justicia en Madero, Tampico y Altamira” señaló. (Con información de Rogelio Rodríguez Mendoza/ EL Diario MX)