Ciudad de México.-
El proceso de relocalización de las cadenas productivas (“nearshoring”) es uno de los factores que están impulsando los ingresos en México de WeWork Latam, firma especializada en la renta de espacios de trabajo para empresas, comentó su directora ejecutiva (CEO), Karen Scarpetta, en entrevista con EL UNIVERSAL.
“Tomando en cuenta las oportunidades que hemos visto durante el 2023 a nivel económico que tiene México, todo lo que está pasando con el ‘nearshoring’ es fundamental para que nosotros podamos establecer la operación de empresas americanas o de distintas partes del mundo que ven en México como operación centralizada y con talento mexicano, la mejor oportunidad para generar crecimiento”, afirmó.
La directiva informó que la firma cerró el primer semestre del año obteniendo resultados sólidos, con un incremento de más de 31% de sus ingresos respecto al mismo periodo del año anterior. En Estados Unidos, WeWork se declaró el lunes por la noche en bancarrota, tras años de problemas financieros que la llevaron a acarrear una deuda de más de 10 mil millones de dólares.
En un comunicado, la compañía anunció su decisión de acogerse al Capítulo 11 de la ley de bancarrota de Estados Unidos ante un tribunal en Nueva Jersey. Explicó que en un modelo tradicional estas empresas, probablemente se tardaría de 12 a 18 meses en establecer sus operaciones en el país, sin embargo, con el modelo de WeWork, la organización está lista para operar en cuestión de tres meses.
La firma toma este rol de acompañamiento de esas empresas internacionales que llegan a México y que necesitan establecer sus operaciones en el menor tiempo posible, con el costo más eficiente posible. Karen Scarpetta, aclaró que en 2021 se decidió constituir la organización en WeWork LATAM con un nivel de independencia que le permitía establecer una asociación empresarial (join venture), algo similar a una franquicia.
“Con ese modelo pudimos establecer una independencia financiera, independencia operativa, independencia como tal para operar el negocio, y tomar distintas decisiones, es por eso que cualquier medida de reestructura que WeWork Inc. tome en Estados Unidos no afectará la operación de WeWork LATAM”, explicó.
Explica que su modelo de trabajo hibrido es el que les ha permitido avanzar ante contingencias como la pandemia y aprovechar procesos como el “nearshoring”.
“Son esas oportunidades de innovación donde encontramos diversas opciones de producto, no solamente nuestras áreas y nuestros metros cuadrados físicos, sino otros productos más digitales que permiten que el usuario pueda elegir el momento en que quiere hacer uso del espacio físico y finalmente invertir cuando lo esté usando. Esos complementos es lo que hace de la palabra hibrido una realidad, elegir una oficina privada, una sala de juntas o un espacio creativo o elegir un espacio de eventos”.
WeWork Latam opera en México, Brasil, Chile, Colombia y Argentina, pero a nivel regional es el país líder y a nivel global es la cuarta plaza más importante. “México es el país a través del cual la organización decidió llegar a Latinoamérica hace siete años”.
“Estamos presentes en tres ciudades, Ciudad de México que es la localidad con mayor presencia de distintos espacios de trabajo, tenemos 15 edificios en diferentes zonas; estamos en Guadalajara, en cuatro ubicaciones; y estamos también en Monterrey en seis”.
WeWork en México tiene en renta más de 55% de los metros cuadrados disponible para ofertas de espacios flexibles, lo que los posiciona como líderes no solo desde el proceso de incluir tecnología de nuevos productos para hablar de trabajo hibrido, tendencias de uso en el espacio, tráfico, etc. sino también desde la parte física de áreas y de disponibilidad de metros cuadrados para los diferentes tipos de clientes con que cuentan.