Monterrey, NL.-
Ante la crisis política en Nuevo León por la disputa entre emecistas y prianistas por el tema del Gobernador interino, el Gobierno Federal podría intervenir, anunció esta mañana el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Cuestionado sobre lo que ocurre en el estado, donde en el primer minuto de este sábado 2 de diciembre entrará en funciones el interino designado por la mayoría PRI-PAN en el Congreso local, ante la oposición del Gobierno actual emanado de Movimiento Ciudadano (MC), el primer mandatario fijó su posicionamiento:
“Primero que se busque el diálogo allá entre las partes, luego que se acuda a las instancias que tienen funciones legales, jurídicas, y si las dos partes piden que participemos, lo haríamos, siempre pensando en el bienestar del pueblo de Nuevo León”.
Ante el encono entre las fuerzas políticas en la entidad, la noche del jueves la administración gubernamental emecistas colocó barreras metálicas y un blindaje en el Palacio de Gobierno, pero la mañana de este viernes fueron retiradas.
Y es que el gobierno aún encabezado por Samuel García, quien tendrá licencia a partir de mañana 2 de diciembre y hasta el 2 de junio del próximo año para participar en la elección presidencial, argumenta que la reciente designación del gobernador interino Luis Enrique Orozco –cercano al priista Adrián de la Garza- es ilegal.
En su conferencia de prensa “mañanera”, el presidente consideró hasta cierto punto normales este tipo de diferencia en el marco democrático del país, cuestiones que dijo pasan incluso en otros países.
“…En una democracia, pues es normal que se den estas diferencias, en las dictaduras no se mueve ni una hoja del árbol de la política, pero en la democracia sí hay diferencias y se tiene que garantizar la libertad y el derecho a disentir”, señaló López Obrador.