Los equipos grandes, protagonistas, deben partir de contrataciones de jugadores que rindan desde que llegan a la institución. Esto aplica para cualquier deporte sin excepción.
Los tiempos de espera para acoplamientos de sus empleados detienen los procesos de la organización que los contrata.
Que si se adapta, que está en proceso de, y muchas excusas que se pueden inventar.
Como decía mi abuelita en el rancho: “un buen gallo cacaraquea en cualquier corral”.
Hay procesos que se deben aprender pero en estos tiempos todo gira más rápido y los minutos se vuelven de 30 segundos.
Así que tan rápido aprendas y te acoples tan rápido será tu ascenso y éxito.
En el fútbol se les daba meses a los refuerzos para que rindieran y un equipo aspirante al protagonismo no se puede dar esos lujos.
Tantos y tantos ejemplos de jugadores que no han resultado porque piden tiempos de espera enormes que la competencia no espera y los equipos en donde militan se verán faltos de tener en cierta posición al jugador contratado para solventar un problema y no hacerlo.
Por eso en México existe el éxito de América, de Tigres en este Siglo 21.
Ahora Rayados ha iniciado bien la campaña con refuerzos que le están dando un efecto inmediato en su accionar.
Elementos que no han vendido a perder el tiempo. Brandon con 3 goles en 4 partidos y el Corcho con 3 asistencias y un Canales recuperado de su lesión que le abren la puerta al equipo para ilusionarse con algo más que liguilla directa.
Los dos primeros llegaron para tener un efecto inmediato en los resultados, lo que indica lo certero de esas contrataciones.
No siempre te resultan, el torneo pasado no fue así.
Tigres trajo a Brunetta y de inmediato se ha notado su fútbol también y con lo que ya había pues aún más.
Los equipos protagonistas no tienen hamacas, así que quien crea que encontrará una está equivocado.
La competencia marca el paso y ese paso es el encajar rápidamente con los que ya están y marcar una diferencia porque para eso debieron contratarte.
Por lo pronto, luce alentador el panorama para los equipos protagonistas en México porque sus contrataciones del semestre están funcionando de arranque.
Efecto más que presto para la cosecha de buenos resultados.