He visto mucho futbol rápido profesional en mi vida. Desde 1991 que estoy en una cercanía muy especial en el indoor con La Raza de Monterrey, La Furia y ahora con el Flash.
Pero lo que ví en la Arena Monterrey en el duelo de semifinales de conferencia entre el Flash y la Ola de Milwakee no tuvo madre.
Y no la tuvo no solamente por un pésimo arbitraje que no supo contar las 6 faltas de un jugador que por reglamento era expulsión o un gancho al hígado en una disputa de balón que quizá también lo era.
De esas puñaladas sistemáticas a lo largo de un partido en donde el silbante es del mismo país que el rival que como mexicano enfrentas.
Pero bueno como alguien me dijo … “con goles les partes la ma…” y sí, el problema para uno y beneficio para otro, es que había que vencer la actuación del portero de la Ola, William, que brindó la mejor actuación de un portero que he visto en mi vida.
El tipo, playera 33 de Milwakee, no jugó como un simple mortal, fue un Terminator en la portería, impresionante, atajó cerca de 27 fogonazos directo a su marco que eran cánticos de gol. Nunca había visto una actuación así en 33 años de seguir de cerca el indoor soccer.
Flash cualquier otro día o partido pudo haber ganado por más de 10 goles pero con un guardameta así es complicadísimo sacar la victoria ya no digo los árbitros.
Juego cerradísimo en donde la Ola aprovechó una en el overtime del mini game para dejar tendido al Flash por 2-1 en el mini mientras que en el primer partido del día se había impuesto la visita 5-4.
Gran campaña regular del Flash invictos con 24 triunfos sin derrota, más uno en playoffs sin embargo no se llegó a la final y eso duele. Sin goles es complicado ganarle a todos en la cancha con diversidad de uniformes.
Hasta donde tope Flash!!!! Se reconectó con la tribuna y eso fue un paso muy importante.