La derrota de Rayados en Columbus por dos goles a uno rompe una racha del equipo local ante los equipos de la liga estadounidense. Y pone a prueba la calidad del plantel albiazul en dos instancias decisivas para estar en dos finales soñadas.
Pero con la fuerza interna del equipo y la potencia de sus individualidades, no sería raro que el Monterrey superara colarse primeramente al play off de la liga MX al salir con todo el próximo domingo en su partido contra Necaxa y luego brindar a su público en casa la satisfacción de superar el gol de ventaja que trae el último equipo norteamericano que sigue vivo en la Concachampion.
Se dice fácil, es cierto. Se vale ser optimista desde luego. Sin embargo, respecto al propósito de instalarse en la final del torneo del área geográfica, sabemos que el Columbus es el campeón de su liga y trae unas individualidades de primera, además de ostentar un juego colectivo de muchos kilates, con una disciplina técnica muy virtuosa, debido a la atención de su entrenador a todos los detalles de lo que ocurre en la cancha.
Es un “paquetón” el que le espera a Fernando Ortiz el próximo miércoles en el estadio BBVA de Ciudad Guadalupe.
Lo bueno es la mentalidad positiva de los integrantes del club, pues derrochan una confianza, rayana en la seguridad, de que sus seguidores serán testigos de la voltereta que le darán al marcador, porque tienen a su favor la fórmula de martillar hasta el cansancio la esperanza de que no todo está perdido tras lo acontecido el miércoles 24 en Columbus.
Y está muy bien esa postura del entrenador rayado y de sus jugadores, porque un gol en contra es hasta un estímulo para soltarse en la cancha y lograr enloquecer a los suyos en un estadio que tendrá que vibrar al unísono con los toques de balón en la estrategia bien estudiada para salirse con la suya.
Sí, sí, el escenario pinta para esa gesta en la Conca y más resuelto el paso de ganar de visitante en el juego final de la liga MX ante Necasa. Sí, sí se oye bien el propósito de desquitarse de ese 2-1 de este miércoles.
Pero también hay que analizar lo difícil que la ha pasado el Monterrey en los cinco partidos que le dan una seria preocupación a su fieles rayados, pues apenas ha ganado uno y empató a duras penas el pasado Clásico contra Tigres, mientras que las tres derrotas son un mal síntoma de lo que ocurre con un cuadro para pelearle al América el superliderato.
Los Rayados están a prueba, no cabe duda, pues de haber estado en la cumbre de la tabla, las combinaciones de resultados en la fecha póstuma del torneo actual lo podría sacar de la calificación directa y ponerlo a jugar el play in.
Así es que no debe quitarse de la cabeza que está prohibido perder el domingo en Aguascalientes, porque Necaxa está hambriento de reconocimiento y hoy que se le ofrece un manjar suculento, no querrá bajar en la tabla y sí tratará de superar por un punto los 29 de los Rayados si se alza con el triunfo en su casa.
En cambio, la derrota de los de las rayas los pondría al alcance de los Tigres, Pachuca y Chivas de Guadalajara si se alzan con la victoria en sus respectivos encuentro.
Así es que si Tano Ortiz está que arde de ánimo por estar en una final, la de la Conca requiere mucha concentración, porque Columbus por algo es el campeón de su nación y vendrá a defender el golecito que le dio el gane en el partido de ida.
Y si el técnico, además, no quiere exponerse a perder su puesto y a la rabia de los seguidores del cuadro albiazul, ha de tener en cuenta que no le queda otra más que ganarle a Necaxa. ¡Vaya prueba en uno y otro escenario!…
