En el marco del Día de la Niñez y pensando en que los menores no siempre son amores…(a veces son un tanto feroces), quiero imaginar como sería un debate Presidencial, si los candidatos hablaran como niños, pero con la misma “mala leche” que -los adultos-aparentan tenerse entre sí. (Ofrezco una disculpa de antemano a todos los niños y niñas…ya que esto es un muy mal ejemplo)….Pero, imaginen a Xochitlita, a Claudita y a Maynecito “debatiendo” más o menos así:
X.- ¡Claudita, eres una tramposa y mentirosa y les voy a decir a todos que no se junten contigo!
C.- ¡Ay sí, mira como tiemblo! ¡Como tus gelatinas!¡Tú lo serás!…Tienes envidia porque yo traigo todas las canicas. Además, todo lo que digas será al revés (como tus pancartas). Nadie se quiere juntar contigo…Ni Maynecito quiere.
M.- ¡Tengo una gran idea! ¡Yo traigo un juego nuevo y más padre! Y si Xochilita quiere jugar también puede…pero sin sus amigos esos Alito y Marquito, en mi casa no me dejan juntarme con ellos.
X.- ¡1, 2, 3 por mí y por todos mis amigos!…A ver Claudita, ¡¿A que no le das un trago a esta agua de “coco” que te traje de mi casa?!
C.- ¡Guácala no! ¡Esa no es agua de coco, ha de ser agua salada del Texcoco! ¡A, E, I, O, U…el burrito sabe más que tú Xochis!
M.- Miren, aquí traigo unos dibujitos para explicarles como podemos jugar un juego nuevo, ya lo juegan muchos en Jalisco y en Nuevo León…Se llama “Naranjas dulces”….se trata de que todos seamos Naranjas y que hagamos
todo así, como anaranjado.. Jejeje.
X.- ¿Naranjas dulces? ¿Algo así como dice el jefe de Claudita?…¿“Dame un abrazo que yo te pido”? ¡No! ¡…Conmigo puro “limón partido” Ya les dije que nada de abrazos! Además Claudita, ¿Sabes por qué dije que yo no iba a “claudicar”? Porque “Claudicar” queda con “Claudia”…Ir con
“Claudia” es “Claudicar”…¿Entiendes mi juego de palabras?
C.- Nuestro juego de los abrazos se trata de que todos seamos amigos del dedo chiquito -hasta con los malitos-porque si nos enojamos, se enoja Diosito. Ah…Y yo por eso te digo “Xochis”…Porque mi maestra de inglés me enseñó que cuando a alguien le esta yendo tan mal como a ti en este juego, hay que decirle “Xochis”..O sea: “Xochis-laif!” Pero la maestra lo escribe “such is life”.
M- ¡Oigaaan!…¡Ni me hacen casooo! ¡Les digo que mejor hay que jugar un juego nuevo…el mejor juego del mundo mundial! ¡Yeiiii!…¡Esta bien padre! Miren así va: “Naranjas dulces, limón partido…” Yo soy la “naranja dulce” y ustedes son el limón al que le vamos a partir su mandarina…muy pronto.
X.- Sí Maynecito, luego enseñas tu juego…cuando seas más grande. Aquí la idea es darle “pamba loca” a Claudita. ¿De qué lado estas Maynecito? ¡Ni me contestes! ¡Claudita, tú no hiciste la tarea!…¡te la robaste! A ver dime, dime…¿Te la robaste o no?
C.- ¡No oigo, no oigo, soy de palo y tengo orejas de pescado!
M.- En serio…hay que jugar a otra cosa…ya nadie quiere jugar como juegan ustedes y sus pandillas, son bien tramposillas…
X.- ¡Ya vas a ver Claudita! Esto huele muy feo. Aquí tengo un letrero que hice para ti, mira: “Claudita Pedorra!”
C.- ¡Lo pusiste al revés! (Duh!) …Pero, pues el que primero lo huele debajo lo tiene!
X.- ¡Claudita, eres una “cochi-niña”! ¡Te voy a decir la “cochi-niña” de ahora en adelante! Y… ¡Tu abuela en bicicleta!
C.- Se dice “cochinilla”, Y aquí la que se vino en bicicleta fuiste tú…¿Será la bici de tu abuela?
M.- La vez pasada, cuando llegó Xochitlita, ¿Venía en la bici de su abuela la “vieja política”? ¡Órale! Mi abuelita trae un carro eléctrico.
¿Ven lo que les digo? Hay que jugar a otra cosa, algo nuevo…algo
diferente. Ustedes ya aburren, siempre es lo mismo. Cuando yo gane, les
voy a hacer muchas ciclo pistas para que las dos puedan ir juntas y pedaleándole al rancho de Don AMLO, ¿Cómo se llama el rancho? …Pero por ahora, mejor les voy a leer la cartita que le escribí a Santa Clos…”Querido Santa…”
¡TIEMPO!…¡Chin! Se acabó el recreo…Pero nos vemos en la salida.
*Cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia. Reitero mis disculpas a los niños y niñas, con mis mejores deseos de que en ellos y para ellos haya un futuro mejor.
