Después de una estancia de altibajos individuales en el América femenil, Katty Martínez regresa a su tierra para cumplir con el sueño de jugar para el equipo de sus amores y usando el número 26 de su ídolo Humberto Suazo.
La vuelta de la goleadora regia resonó fuerte en la afición de Tigres y Rayadas por el pasado felino de Martínez, quien además de su calidad deportiva se reconoce por su carisma y talento como creadora de contenido y manejo de redes sociales.
El reporte médico de Rayadas anunció que la delantera se lesionó desde su concentración con la selección mexicana y deberá de esperar un par de semanas para estrenarse con el uniforme rayado, en su casa y con su gente.
Katty no es la primera jugadora que ha jugado para los dos mejores equipos de la liga femenil; Tigres recién fichó a la mediocampista Andrea “La Chata” Hernández, quien aunque llegó de Bravas de Ciudad Juárez, tiene pasado rayado.
Esta movilidad deportiva hasta ahora ha sido, fuera de la tradicional “carrilla” regia a la hora de los partidos, considerablemente respetada por la mayoría de las aficiones, quizá entendiendo que las opciones reales de vivir del futbol y aspirar a ganar campeonatos en México son muy limitadas.
Hasta ahora, solo las cinco grandes protagonistas de la liga: Tigres, Rayadas, América, Chivas y Pachuca son las organizaciones que se sabe pueden pagar lo suficiente para que una deportista de alto rendimiento se dedique a eso, a desarrollar su talento y facultades.
A Martínez, la afición de Tigres nada le tiene que reprochar. Su desempeño en la cancha que le dio títulos de goleo y campeonatos al equipo la colocan como histórica del club. La única mancha es la forma poco clara en la que salió del club hacia el América.
Es en este punto donde nueva e invariablemente la conversación vuelve a los manejos directivos en Sinergia Deportiva.
Así como se fue Katty después salió Roberto Medina, llegó y se fue Carmelina Moscato y hoy llega Milagros Martínez, quien se juega su puesto en esta temporada por arrancar después de que su primera campaña con Tigres fue agridulce aún y con la contratación de la campeona del mundo Jenny Hermoso, quien aún sigue quedando a deber. Rayadas le apostó en grande con el regreso a casa de una goleadora legendaria.
El tiempo y la temporada dirán si la hija de Monterrey será pródiga. De Rebote Dicen que mal empieza la semana al que ahorcan en lunes.
Sin refuerzos, y una campaña en medios afines a todo lo que da, los Tigres de Paunovic perdieron la oportunidad de ganarse una copa molera que calmara las aguas de incertidumbre que siguen agitadas después del Siboldigate.
Interesante será ver que parte del vaso a medias quieren ver los aficionados felinos: ¿la medio llena en la que el valor de la copa es minúsculo y que es más un partido de pretemporada o la medio vacía, en la que el América sigue sumando partidos sin perder ante los universitarios?
Sea cual sea la visión, la realidad es que todo apunta al que parece ser el último baile de Gignac y Carioca con los felinos será tormentoso.
