¿Será éste el panorama que nos presentan los equipos locales?
Si nos ilusionamos, es porque tenemos la esperanza, el deseo, la confianza, el ánimo de que las cosas sucedan como lo anhelamos con nuestro equipo favorito; caso contrario, podemos caer en una fantasía, un espejismo, una ficción, una imaginación, que nos causará un malestar por no conseguir lo que ilusionamos.
Esto está pasando precisamente en los equipos locales, llevan a sus seguidores en una semana, de la ilusión a la siguiente semana, a la fantasía.
Tigres llegaba de dos clásicos perdidos y se pensaba que el equipo iba en marcado descenso, pues a la siguiente jornada vuelve a perder ahora con Mazatlán, pero, ¡oh, sorpresa!, en su partido ante Pachuca regresa a la victoria, que viene a calmar un poco las turbulentas aguas dentro del equipo.
Aunque de acuerdo a los partidos que siguen para los felinos en el torneo, la cosa “no pinta” para que sea de felicidad y si para medir cuál es el real nivel del equipo; estos son los partidos que tiene Tigres en el cierre, visita a Xolos, recibe a Toluca y finalmente visita a Cruz Azul. Partidos de Halloween o travesura: Ilusión o fantasía.
Por la acera de frente, es decir por la banqueta de Rayados, llegaban con un panorama totalmente diferente al de sus vecinos; dos clásicos ganados de forma consecutiva y tenían el campo abierto para seguir avanzando sin preocupación alguna, peeeero, recibieron a Pumas y apenas les alcanzó para empatar 0-0 y luego al América perdieron 2-1, sin olvidar que antes de jugar contra Tigres, habían perdido ante el San Luis.
Ahora le quedan solamente dos partidos, pues habían adelantado su partido contra Puebla de la jornada 16, que ganaron 1-2, quedándoles dos partidos de local, ante Atlas el sábado 2 (Día de Muertos) y el domingo 10 contra León.
Si no quieren estar en la encrucijada de ilusión o fantasía, son dos partidos de seis puntos, que deberían “echarse a la bolsa”.
Nos leemos en la próxima.