A sus 31 años de edad y desde su llegada a la F1, en el 2011, Sergio Pérez ha picado piedra para ganarse el sitio donde está, y a punto estuvo de quedarse fuera del “Gran Circo” en las vísperas de la temporada 2021.
De aquí para adelante todo es ganancia para Checo Pérez. Y es que pasada la euforia de la sexta edición del Gran Premio de México de F1 vale la pena echar un vistazo a lo sucedido, y el tapatío ha dejado registrado su nombre en una nueva página para el automovilismo mexicano.
Y es que Pérez, con su tercer lugar, convirtió la tarde del domingo en una actuación histórica para su trayectoria al convertirse en el primer mexicano de Fórmula 1 que sube al podio en el GP de México.
Con lo anterior, Checo superó el cuarto lugar que logró el legendario Pedro Rodríguez en 1968. Por cierto, el circuito capitalino lleva el nombre de Hermanos Rodríguez, en homenaje también a Ricardo Rodríguez, pilotos que dieron lustre en la década de 1960 y principios de 1970 al deporte motor nacional.
El 2021 se ha convertido en un año de ensueño para Sergio Pérez, primero, al estar en un equipo de primer nivel, segundo, cosechar cinco podios en la presente temporada, tercero, ser el cuarto mejor piloto en la tabla de posiciones, cuarto, hacer historia en su país con el podio recién logrado y quinto ser considerado ya un piloto élite.
Las claves del actual éxito de Checo Pérez han sido dos, disciplina y orden. Tiene claro su posición de segundo piloto de RB, trabajar para el equipo y por ende lograr resultados de manera grupa e individual.
A sus 31 años de edad y desde su llegada a la F1, en el 2011, ha picado piedra para ganarse el sitio donde está y a punto estuvo de quedarse fuera del “Gran Circo” en las vísperas de la temporada 2021.
Pero ese trago amargo y el inicio complicado en las primeras cinco carreras con Red Bull, por lo que los directivos dudaban de su capacidad para estar en el equipo, ha pasado a segundo plano con lo vivido en los pasados cinco días.
Llega el Red Bull Show Run CDMX 2021 y más de cien mil personas cobijan al piloto tapatío, posteriormente en las prácticas previas muestra su habilidad y hasta es el más rápido en la tercera sesión libre, vendría la calificación y es el único trance difícil al no lograr buen tiempo y salir en cuarto sitio.
Pero el domingo todo cambio, y Pérez fue alabado y vitoreado por más de 370 mil personas reunidas en el circuito capitalino.
Y aquí entra otra faceta de Checo Pérez, como buen anfitrión a la fiesta en su casa, compartió los reflectores de su hazaña con la afición, su coequipero, equipo, familia y su padre que en ese momento tal vez salió más tiempo al aire que el mismo piloto.
Sabemos que en este 2021 Checo no será campeón en la F1, difícilmente lo logre en las próximas temporadas, por factores que juegan para que se haga realidad, pero lo que sí es cierto, y como lo dijimos al principio, de aquí en adelante todo es ganancia para el tapatío.
Nos leemos en la próxima Línea de Arranque.