Nadie se salva de la frase, con la que titulo esta columna, en el fútbol mexicano.
La historia no me dejara mentir. Estás del lado de quien tiene control de la Liga MX o ya te fregaste, solamente con goles claros y legítimos podrás aspirar a un título, siempre y cuando los árbitros no revienten a tus jugadores durante los partidos además de paciencia y calma que nos amanece.
Hace poco más de una semana Tigres lo comentó mediante un comunicado donde se anticipa a cualquier represalia de dejar la televisora de Chapultepec y formar con otras propuestas que, además de buen billete, le darán de seguro un mejor trato en las crónicas no como en la actual, donde sus grandes solo existen y los demás son provincia (excepto Chivas que es su creación). Sin considerar que ya no somos colonia española y son estados soberanos y no provincias.
La presidencia de Tigres en la persona de Culebro tiene razón en adelantarse con un comunicado señalando a los silbantes. Y cómo no, si el directivo viene de allá donde se cocina el negocio. Obi que se las sabe.
Creo que si hay un campeón diferente a quien me imagino lo será (bi), será porque no cayó en las provocaciones arbitrales, además de anotar muchos goles que sean claros y complicados para que ni con todas las triquiñuelas los puedan fregar aunque ya vimos que hasta en los primeros mundos futboleros se puede hacer.
Si no, pregúntenle al Barsa en el clásico español contra el Real Madrid.
¡Descaro del tamaño del estadio!
