En la vida solemos volver una y otra vez a donde fuimos felices, a donde los recuerdos nos traen memorias de alegría.
Rayados acaba de revivir sus mejores tiempos eligiendo no solo a un bombero, sino al bombero predilecto en la historia del club. Víctor Manuel Vucetich, un técnico que no teme a equivocarse, a fracasar, pero, sobre todo, no teme a intentarlo, revisando su historial, siempre estuvo dispuesto a aceptar equipos independientemente de su poderío económico, plaza o grandeza.
El “Rey Midas” representa solo con su presencia en el banquillo la última época dorada de un club con sed de mantener un paso ganador por más de 17 jornadas. El futbol tal vez no sea el más vistoso, el más llamativo, no será Pep, pero es muy efectivo teniendo a los jugadores adecuados.
La clave del éxito del club estará ahí, en saber elegir a los jugadores que lleven al club al siguiente nivel. Teniendo un hombre en el banquillo ganador y que brinda estabilidad, el siguiente paso será evaluar a los jugadores que deben salir y deben llegar.
En los últimos tiempos han sido desatinados en detectar cuando un jugador ya no brindará lo que se pensaba y han cambiado más técnicos que jugadores reciclando a los mismos, la respuesta al final siempre está en la cancha.
Aguirre no solo se fue por sus declaraciones, falta de estilo futbolístico, liderazgo nulo, sino también por tener una plantilla sin la calidad suficiente para subir uno o dos peldaños. Vucetich no es mago, él sabe gestionar plantillas de buenos jugadores y llevarlos a campeonar, pero esta directiva no ha aprendido a fortalecer y robustecer el plantel en los momentos adecuados.
Más allá de si se califica aunque sea en repesca, lo que resta de este torneo es para evaluar quién debe quedarse y quién debe irse, más allá de los refuerzos que deberían ser palomeados por el técnico y no solo por los altos mandos que tal vez sepan administrar los dineros, pero de futbol, se necesita un sexto sentido que aderece una preparación adecuada en visorias y gestión de talento.
Hoy será un partido de reencuentro entre la afición y su equipo, la conexión será Vucetich, pero será muy endeble y corta si los siguientes pasos no son los adecuados, la afición ya no desea el papel de mero espectador que paga, quieren tener más voz en un mundo cada vez más corporativo que quiere decirle a los “hinchas” cómo comportarse.
Alguien tiene que escuchar, allá arriba, los que mueven el mundo futbolístico, deben pensar mejor en cómo hacer las cosas de ahora en adelante, el mejoralito Vuce no es permanente, cada partido es una historia y veremos qué nos depara hoy, mejor marco no hay, duelo de sotaneros, pero con una rivalidad reciente muy rica.
Tiempo al tiempo, veremos al final del día si de algo funcionó la hostilidad vasca.
¡Saludos DESDE EL SILLÓN!
Daniel Garza, 36 años, nacido en Monterrey, diseñador grafico, dedicado al servicio cliente en empresas nacionales e internacionales. Rayado y apasionado de los deportes.