Vaya ruta hacia WrestleMania que hemos tenido este año, desde el evento Royal Rumble, el Main Event con la lucha de Campeones Mundiales hasta la muerte de Scott Hall quien se rumoreaba que participaría junto con algunos miembros de la nWo; pero el día de hoy la noticia que vuelve a sacudir al mundo de la lucha libre es que Paul Levesque, más conocido por todos como Triple H, anunció su retiro de los encordados por motivos de salud.
Para entrar en detalles, Hunter tuvo una enfermedad que le causo una neumonía tan fuerte que le había entrado líquido a los pulmones y, a su vez, también le estaba afectando el corazón, esto ocurrido en el mes de septiembre; mismas fechas donde a Triple H se le quita del puesto de creativo principal de NXT y a su vez, despiden a gran parte de sus más cercanos colaboradores dentro de la entonces marca negra y dorada. Si bien, muchos nos alegramos de que Hunter siguiera vivo, todos nos quedaremos con la espinita clavada de no ver una lucha de despedida muy emotiva para los fanáticos.
Las generaciones recientes conocen al Triple H que era la mente de NXT y que en raras ocasiones lo veías luchar, yo lo conocí hace 20 años cuando pasaban la WWE en el Canal 52 de MVS los sábados en la noche. Me tocó presenciar la que fue su mejor época (y para algunos fanáticos la peor de WWE) cuando él era el Campeón Mundial de Peso Completo de la marca Raw y tenía rivalidades épicas ante Rob Van Dam, Shawn Michaels y Kane, siendo esta última donde presencie el segmento con más cringe del programa a la tierna edad de nueve años y mi abuelo no sabía cómo reaccionar… si lo quieren ver búsquenlo en YouTube como Katie Vick Funeral y verán lo que les digo. Pero ese Triple H que yo conocí era el mejor rudo que había en la época, era el tipo a vencer si querías salir con el título en tus manos.
Los más contemporáneos recuerdan a Triple H en sus inicios como un aristócrata refinado de nombre Hunter Hearst Helmsley que por poco su legado nos despegaba si no hubiera participado en el MSG Curtain Call, pero con el tiempo se esforzó ganando títulos de media cartelera como el Intercontinental y el Europeo, y que por causa del destino, tomaría las rienda de una de las facciones más importantes de la WWE como lo fue D-Generation X hasta el año 2000. Y si hablamos de facciones lideradas por Hunter, mi generación creció con Evolution. Un grupo donde se conjuntaba el pasado, presente y futuro de la lucha libre, siendo Ric Flair el pasado con 16 títulos mundiales reconocidos; Hunter el presente y dos jovencitos de nombre Randy Orton, luchador de tercera generación, y Batista el futuro; el otro grupo que lideró en su estatus de directivo fue The Authority que representaba el poder de hacer y deshacer a su antojo.
Pero si hay un mote que Triple H se lo ganó a pulso además del “Juego” y el “Asesino Cerebral”, siempre será el de “Rey de Reyes” por sus 14 títulos mundiales en su historia al vencer a gente importante como Mick Foley, Big Show, The Rock, Chris Jericho, Shawn Michaels, Goldberg, Randy Orton, The Undertaker y Roman Reigns, que si no fuera por algunas lesiones serias en la zona de los cuádriceps, ya hubiera empatado, sino superado el récord de Ric Flair y John Cena de títulos mundiales.
Solamente queda por decirte Triple H, gracias por dejar literalmente tu vida en el cuadrilátero…por regalarnos momentos divertidos como luchador técnico y por esos momentos que te hicimos odiar como rudo, y sobre todo esas enseñanzas que les transmite a las nuevas generaciones que buscan hacerse de un nombre dentro de este negocio…y sé que esta vida hay sacrificios, e hiciste uno muy grande no solo por ti, sino por tu esposa y tus tres niñas que quieren que papá este en casa y verlas crecer.
Larga vida al Rey de Reyes.