En medio de tantas notas negativas o controversiales que da el deporte, hoy tenemos los mexicanos unas gotitas dulces en nuestro café matutino, al enterarnos cómo Karla Ximena Serrano logró un cierre espectacular sobre Ai Ooyama, con lo que dio al país su primer título en el Campeonato Mundial de Atletismo Sub-20 en Cali, Colombia.
Y nos alegró ver su puño en alto al constatar su mejor marca de 46:24.35 minutos, apenas unas fracciones arriba de la japonesa, quien terminó con 46:24.44.
“Soñaba con una actuación increíble, y lo conseguí”, gritó de alegría al saborear tan difícil triunfo. “Valió la pena tener la presión de una rival de altura porque me obligó a dar el 200 por ciento”.
Esta victoria es un bálsamo por el desarrollo de una atleta femenil que en lo individual pone el nombre de México en lo alto, en espera que también las chicas que están representando al país en Costa Rica empiecen con el pie derecho el torneo de futbol soccer de esta rama, tan criticada por las filtraciones noticiosas sobre el papel de su entrenadora y demás cuerpo técnico con las propias jugadoras.
Y no es que valga mucho la participación deportiva como para pensar que traerá beneficios económicos a México o que veremos una disminución de la alta inflación o de la criminalidad, pero al menos distrae positivamente el ánimo para apagar las llamas incendiarias que flagelan a quienes no tienen recursos más que para vivir al día o no pueden saciar satisfactoriamente su sed por la falta de agua en sus tuberías domiciliarias.
Por lo menos, cuando a nuestros representantes del deporte les va bien, algo tenemos para comentar en los corrillos de amigos, y no caer nada más en lo negativo de la corrupción de la liga profesional del futbol soccer que ha prometido analizar con lupa el Presidente López Obrador, a pregunta de un acucioso reportero que ha hecho investigaciones acerca del papel de los representantes de jugadores, triangulando ganancias con entrenadores y directivos, al inflar los precios de las cartas y, supuestamente, al defraudar los clubes al fisco con dobles nóminas.
Karla nos ha hecho gozar lo que representa subir al podium y bajarle a los decibles de lo que sucedió en torno a la conducta de Javier “El Chicharito” Hernández quien se negó a darle un autógrafo a un niño y luego fue acusado de menospreciar nuestra bandera nacional, aunque él ha sostenido que no se trató de lo que la prensa ha difundido sino de un descuido, y, por otra parte, anda en busca del muchachito para hacerle mil regalos y que olvide el desaire momentáneo.
Y a nivel internacional, algo es algo al darnos cuenta del castigo que recibió en Rusia una basquetbolista norteamericana, sentenciada a 8 años de cárcel, por llevar un ungüento para el dolor de su rodilla y ha sido utilizado como prueba de tráfico de estupefacientes, en un país enredados en guerra de bombas con Ucrania y en guerra diplomática y política con Estados Unidos y la Unión Europea.
Celebremos, entonces, las gotitas dulces que nos ha dado nuestra Karla.