Todavía me estaba saboreando las dos finales, de la Eurocopa y de la Copa América, cuando volvemos a nuestra realidad y ¡vaya de que manera!, con dos partidos en los cuales estuvieron involucrados los equipos locales, Tigres y Rayados.
Analicemos primero el de Tigres.
Un partido de dos momentos. El primero del América, pues en los primeros 30 ó 35 minutos, el cuadro azulcrema dominó el encuentro y tuvo una ocasión clarísima de gol que fue desaprovechada por el español Fidalgo, cuando era más fácil meter el balón en la portería felina que echarla por encima del travesaño. Jolines, ¿qué quisisteis hacer chaval? Le pusisteis mucha crema. Y en el pecado llevaron su penitencia.
El segundo tiempo fue todo lo contario, dominio total de Tigres, estaba pintado que más tarde que temprano caería el gol de los locales y “adiós Nicanor”. Y éste llego al 87’, en una jugada que Tigres se la había pintado anteriormente al equipo visitante y no la aprendieron, bueno pues, va de nuevo y ahora sí, los agarraron como al chinito. 1-0, adiós América y gracias por participar.
Ahora el de Rayados.
Después de la catastrófica goleada que les infirió el equipo de Cruz Azul, a Rayados le urgía retomar el camino el triunfo, y la oportunidad les llegó de inmediato.
Con polémica y todo incluido el equipo de azul y blanco fue a al Estadio de los Rayos y derrotó 1-0 al Necaxa, que sintió lo duro de una correcta aplicación de las reglas de juego por parte del árbitro y sus auxiliares en el VAR.
Rayados se había puesto al frente con gol de Jordi Cortizo al 56’ y parecía que “el barco” empezaba a enderezarse, pero al minuto 73 llegó el gol del Necaxa acompañado de la polémica y “ardió Troya”.
La aplicación de la regla 11, El fuera de juego, fue correcta ya que el jugador necaxista, Diber Cambindo interfirió con su posición en el defensor de Rayados Víctor Guzmán y por lo tanto el gol fue invalidado. Esta polémica decisión trajo consigo las protestas de todos los jugadores necaxistas y por consiguiente la expulsión de Brayan Garnica por insultos al central.
Algo que habría que destacar lo siguiente (y que muy pocos nos dimos cuenta), que el asistente uno Leonardo Javier Castillo ni sancionó fuera de juego, ni tampoco señaló que el balón había rebasado la línea de meta de la portería de Rayados; y el equipo rayado inicia una descolgada con cinco jugadores frente a dos jugadores necaxistas que quedaron defendiendo su meta. Pobre asistente 1, ni sancionó fuera de juego y ni señaló el gol, o sea, “ni fu, ni fa”.
Seguramente le dirán los comisionados arbitrales, “Chamaco, gracias por participar”.
Vayamos al texto de la regla 11 para no dejar dudas.
1.- Posición de fuera de juego
Se considera que un jugador está en posición de fuera de juego cuando
se encuentran, total o parcialmente, más cerca de la línea de meta contraria que el balón y el penúltimo adversario.
Hasta aquí no hay duda. Cambindo estaba más cerca de la línea de meta contraria que el balón y que Víctor Guzmán.
2.- Infracción por fuera de juego
Únicamente se sancionará a un jugador en posición de fuera de juego en el momento en que el balón toca o es jugado por un compañero de equipo si llega a participar en el juego de forma activa de una de las siguientes maneras:
*intentando jugar claramente un balón cercano mediante una acción que tenga un impacto en un adversario;
*realizar una acción que afecte claramente a la posibilidad de un adversario de jugar el balón.
Aquí tampoco no hay duda.
Nooo ¿A poco tiene dudas? Luego se lo explico con manzanas.
Nos leemos en la próxima.