Seré breve: el discurso de jugar con emanados de la cantera es de equipos que no tienen dinero para invertir, en pocas palabras, no hay con qué comprar calidad y echan mano de lo que tienen para sobrevivir.
Entiendo que todo jugador sale normalmente de alguna fuerza básica, escuelita o equipo que le ayudó a formarse, pero en el fútbol profesional, aún los mejores equipos formadores como Pachuca, Pumas, Ajax o PSV, requieren de fuertes cantidades de inversión para poder generar algo que les haga tener aficionados que sigan de su fútbol.
Rayados enfrentó este domingo a un Pumas plagado de nuevas incorporaciones, desde Eduardo “Toto” Salvio, Dani Alves, Del Prete entre otras incorporaciones; el equipo del Pedregal había presumido de querer resurgir su cantera, aquellas de las glorias pasadas que los llevó a campeonatos y de la cual se lograron jugadores que incluso llegaron a Europa; si bien esto es cierto, el común denominador es que para que cualquier joven en la vida o la cancha logre desarrollarse, necesita de buenos ejemplos de personas o jugadores que le muestren de su experiencia el como enfrentar los retos venideros.
Pachuca siendo un equipo que ha vendido muchos jugadores en México y algunos a Europa, tiene en sus filas infinidad de extranjeros que complementan su base mexicana. Entienden los Martínez de la necesidad de generar competencia que intensifique el desarrollo de su base al enfrentar a mejores en su posición.
Pumas, Chivas y otros han navegado con la bandera de querer levantar sus fuerzas básicas, el orgullo nacional, los jóvenes del mañana para compensar los moscos emanados de sus arcas vacías que simplemente no les permiten satisfacer los sueños más deseados en sus mentes futbolera, aquellos jugadores por los cuales vale la pena sacrificar parte de tu salario para comprar un boleto que ya de por sí es exageradamente caro.
Mientras Pumas se cansó de navegar en la mediocridad, viendo cómo sus fuerzas básicas entrenaban con otros jugadores jóvenes y maduros de medio pelo para enfrentar semana a semana a gargantones de equipos como América, Rayados, Tigres o Cruz Azul; por fin tuvo la genial -pero añeja-, idea de mejor traer jugadores probados que puedan ayudar a dar el salto de calidad en el plantel, en los resultados y buscar un poco de la cada vez menor atención que hay hacia la Liga MX.
Invertir para competir y entre más inteligente, mejor. Parece cíclico que los equipos tengan cierta cantidad de dinero y si la saben gastar, lograrán mantener un elevado nivel de competencia durante más tiempo posible, pero llega el momento en que todo equipo falla en contratar jugadores con calidad, mentalidad y persistencia por lo que se vacían las arcas y siempre quedará el orgullo de decir, me la juego con los jóvenes, ah jóvenes, carne de cañón para directivos que simplemente no supieron decir, lo hice mal.
Pumas es un ejemplo más, así como las Chivas hace años con Almeyda y su inversión que dio campeonatos para después dejar de gastar y volver a la mediocridad. Miguel Mejía Barón ha dado al clavo, si le resulta o no esta por verse, pero una vez más se ve el papel del dinero, la inversión y la calidad de los jugadores, la juventud una vez mas tendrá que adaptarse y competir ante una jerarquía ya ganada por jugadores con años de recorrido, esa competencia que les hará crecer si la aprovechan.
Para los que perdieron la titularidad con Alves, Del Prete y Salvio, espero aprovechen y compitan, que las oportunidades por falta de dinero se les acabaron, al menos este semestre o hasta que el presupuesto se agote en la UNAM.
¡Saludos Desde el Sillón!