A propósito de mis 40 años en el periodismo, recuerdo que mis primeros trabajos que hice en Deportes de El Porvenir fueron reportajes seriados cuando pertenecí al llamado ‘grupo Swat’ de reportajes especiales.
Era 1987 cuando el doble medallista olímpico, el marchista Raúl González, regresaba de su retiro para incursionar ahora en el maratón con miras a los Juegos Panamericanos de Indianápolis 1987.
Después de esa efímera aventura del ‘Matemático’ propuse a mis jefes del periódico un reportaje seriado con él, pues no descartaba participar en las Olimpiadas de Seúl 1988, intención que hizo a un lado cuando fue designado director de la CONADE por el presidente Carlos Salinas de Gortari.
De ese reportaje seriado que incluyó un seguimiento diario de sus entrenamientos en la pista de tartán del Comité Olímpico Mexicano y en el Ajusco, nació una amistad que todavía conservo. Cuando Raúl viene a Monterrey procuramos, al menos, citarnos en un café.
Mis ganas como estudiante de la FCC de la UANL de ser reportero de Deportes se estaban cumpliendo en El Porvenir, a donde entré el 17 de septiembre de 1984 a la sección de Cultura.
En esa misma etapa dentro del ‘grupo swat’ hice otro reportaje comparativo seriado de cómo trabajaban las fuerzas básicas de Tigres, Rayados, América y Cruz Azul en la formación de jugadores profesionales, y viajé a la Ciudad de México.
En 1986 había cubierto por El Porvenir el Mundial de Futbol México 86, y ese mismo año -y en 1987- el regreso de la Fórmula 1 al Autódromo Hermanos Rodríguez como enviado especial a la CDMX.
La veces que se ausentaba el editor de Deportes, Julio Alcalá, ocupaba su lugar para darle órdenes de trabajo, que en verdad no necesitaban los reporteros porque cada uno tenía sus fuentes: Manuel González, Rolando Macías, Agustín García, Martín Contreras, Dionisio Herrera y Benito (no recuerdo su apellido).
Trabajé hombro a hombro con uno de los mejores esquemadores de páginas, que en realidad era un diseñador, además de excelente periodista: Javier Nava (QEPD), a quien aprendí mucho de lo que he aplicado en mi carrera cuando se trata de visualizar una portada de periódico.
Con el paso de los años mis sueños de estar cien por ciento dedicado a los deportes los concreté en El Diario de Monterrey, una historia que he escrito cada vez que se ha dado la oportunidad. Y después en Hora Cero cuando en 2022 lanzamos la plataforma Hora Cero Deportes.