Una de las festividades más importantes del mundo taurino es sin duda la Fiesta de San Fermín en Pamplona capital de la provincia de Navarra en el norte de España. La mundialmente conocida “Pamplonada” es un legendario festival que dura nueve días a partir del 7 de julio de cada año, en el que atrevidos corredores guían a los toros por las calles de la ciudad a la Plaza Monumental de Pamplona, coso inaugurado un 7 de julio de 1922 con toros de Vicente Martínez para los espadas, Julián Díaz Saleri II, Juan Luis de la Rosa y Marcial Lalanda.
Las “Fiestas de San Fermín” tienen su origen en el lejano siglo XII cuando Pamplona era un poblado pequeño y desde entonces se lleva a cabo la celebración en honor a quien se considera el primer Obispo de Pamplona es decir a San Fermín.
La Fiesta en honor a San Fermín está íntimamente relacionada con las corridas de toros que empezaron a celebrarse a partir del siglo XIV cuándo los oriundos de la provincia Navarra trasladaron su fiesta religiosa al mes de julio, no obstante que la conmemoración a San Fermín se da el 10 de octubre, ese cambio se debe a que en esa fecha era común que las lluvias arruinaran todo de tipo de celebración y festividad. La historia nos dice que fue en 1591 cuando en esa ciudad navarra se celebraron los primeros “Sanfermines” con danzas típicas, procesiones religiosas, música y fundamentalmente corridas de toros.
Hoy después de 431 años de los primeros “Sanfermines”, los oriundos de Pamplona y miles de personas de todo el mundo se reúnen a partir del día 7 del séptimo mes del año y por nueve días para disfrutar de una fiesta lúdica en las que destacan los bailes, banquetes, juegos, diversión en las calles y principalmente las corridas de toros destacando las ya mundialmente conocidas “corridas de los encierros” mismas que consisten en llevar a los astados desde las afueras de la ciudad hasta la mismísima Plaza de Toros por las calles de la ciudad en el que se dan cita cientos de aficionados quienes arriesgando su vida, esquivan en lo posible a los toros que a toda velocidad galopan por el trayecto citadino.
En éstos últimos días hemos visto por televisión las festividades en honor de San Fermín y con ello podemos refirmar lo importante que es, conservar las tradiciones culturales y religiosas y en las que los “Toros” siguen estando presente, esperamos sinceramente que los anti taurinos no haga ninguna mella en esta y otras festividades populares y que la “Pamplonada” y su “pañuelo rojo” atado al cuello se siga dando para beneplácito de miles y miles aficionados y no aficionados que siguen venerando y celebrando desde hace cientos de años al santo patrono de Pamplona.
Olé por el “Chupinazo” y por los nueve días de los “Sanfermines” en Pamplona.