Se esperaba un triunfo de Tigres, vista la situación que se vive en el hospital Rayado, que dio los primeros 15 minutos del partido algo de juego ante los felinos.
Logró dos jugadas contra el arco de Nahuel Guzmán, quien las resolvió con muy buenas atajadas, evitando los goles a Rayados.
De ahí para el real el Monterrey se perdió en la cancha, en donde Tigres impuso sus condiciones ante un Monterrey donde solamente sobresalieron con algo de esfuerzo de Tecatito Corona, Cortizo y Canales.
Meza y Romo se apagaron completamente a partir de los 20 minutos de juego, perdiendo totalmente la idea del juego de conjunto con sus compañeros, con toques de balón y pases sin sentido, y sin aportar a la defensiva.
Con estas facilidades Tigres aprovechó y tomó control del balón y la cancha, que dio frutos con el primer gol de Gignac, con el cual empató a Bahía en 11 goles anotados en Derbis Regios, y lo superó con el penalty qué anotó.
Hoy la diferencia principal lo fueron los arqueros, con Nahuel haciendo lo que hace regularmente, evitar goles en su arco con grandes atajadas.
Andrada por el otro lado fue el culpable del penal en su contra, al jugar mal el balón y dárselo a un compañero en corto, cuando estaba con la marca encima… Ahí Andrada debió haber despejado evitando cualquier riesgo.
Otro de los problemas del Monterrey fue el haber colocado en la central a Stefan Medina, y como marcador de Gignac, quien a todos los balones va, y que lo superó en 4 ó 5 ocasiones, incluido en el primer gol.
A partir del minuto 29 fue un control total del balón por parte del equipo de San Nico, tocándolo a placer en todos los sectores de la cancha.
Y vino el tercer gol en el minuto 71 por un balón que le cayó a Lainez en los límites del área grande, y sin marca dio un zapatazo potente y cruzado que pasó por un mar de piernas pegando en el poste izquierdo de Andrada, terminando en las redes.
Este Rayados a lo largo de 60 minutos, más otros 10 de compensación, fue exhibido totalmente, mostrando la debilidad por la ausencia de sud delanteros lesionados y la falta de entrega de 2 ó 3 jugadores en la cancha.
Ante el fuerte dominio que tenía Tigres, el Tano Ortiz decidió sacar a Canales y al Tecatito, entrando Funes Mori y Joao Rojas.
Además cambió a Govea y Meza, por Jonathan González y Ponchito González.
El cambio de Meza lo debió haber realizado desde inicios de segundo tiempo, viendo el bajo rendimiento del srgentino, pero entrando Rojas.
Por su parte Siboldi, viendo el dominio total de su equipo en la cancha, se dio el lujo de cambiar a Gignac, Quiñones, Lainez, Córdoba y Samir, y aún así Rayados siguió sumido en la mediocridad en la cancha.
En los últimos 60 minutos Rayados no género peligro real ante el marco de Nahuel.
Mucho ha de trabajar Tano Ortiz para hacer jugar a Rayados, sin excusas de que tiene jugadores lesionados, o que 2 ó 3 no muestran su calidad en cada partido como debieran. Y la culpa es del técnico por mantenerlos en el cuadro titular.
En fin, una derrota muy merecida, aunque se pudieron haber evitado 2 goles, pero eso muestra las deficiencias que hay en el plantel.
Y a como se ve la problemática de Rayados, se ve que en el resto del torneo batallará para conseguir puntos, incluso con el riesgo de no calificar.