Salió humo blanco y se seleccionó al sustituto de Demichelis, Torrent, cuyo palmarés básicamente incluye ser auxiliar de Guardiola, siendo español para un equipo españolizado, es la opción con la que José Antonio Noriega se juega el puesto, porque no hay manera de volver de otro fracaso en Monterrey.
Rayados busca grandeza, pero ha fallado en técnicos y jugadores, y hasta ahora, también directivos. El club rayado tiene una manera de hacer las cosas que me hace pensar que busca jugadores que te den grandeza, que te impregnen lo que el club no puede emanar todavía, pero no ha logrado contagiarse de mentalidad y futbol de un Canales, Ramos y Torres, porque contrata practicantes de técnicos, posición menospreciada por Noriega hasta ahora.
La grandeza de un Vucetich la tiró por la coladera, creyendo que el “money ball” haría milagros en equipo que necesita más “feeling” que “data”. El karma de correr a tu histórico como Víctor Manuel se está pagando caro, con esos 40 puntos que ahora se ven cada vez más lejos y es probable que no vuelvan a suceder, por lo que ahora traer a un entrenador ya entrado en años, pero no en títulos, al menos no por su cuenta, sino que carga con el aura de triunfos ajenos de un tipo como Guardiola que ha ganado con distintos asistentes.
Equipos como América ya tuvieron esa transición de recibir grandeza de sus jugadores para ahora ofrecer rehabilitar carreras como Rodrigo Aguirre, que aquí fue acribillado con críticas y allá ya fue campeón, por lo que la grandeza se siente en el ambiente mientras que en el club regiomontano se vibran dólares, sabiendo que hay dinero por todos lados para absorber, con vacaciones aseguradas por no pelear lo que tanto se ansía, trofeos.
A nivel internacional Rayados participa, y nada más, porque cada Mundial de Clubes o Concachampions después del 2019 se ha mandado al carajo, justo cuando los torneos son interesantes, cuando los mejores saben que hacer, Rayados ha fallado; y a nivel local es lo mismo, simplemente no saben que hacer en momentos cumbre en los que se necesita esa pizca de grandeza para sacar adelante los momentos adversos que separan a los grandes de los aspirantes.
Mientras América te empapa su grandeza y hace todo lo posible por conservarla cada torneo; en Monterrey están desesperados porque un español como Canales que jugaba en un equipo mediano español te de algoque no se ve logren pronto, pero a su vez rodean a sus estrellas con jugadores de medio pelo con los que difícilmente aprenderán cosas nuevas ni, aunque jueguen con Messi o Cristiano.
Mientras América emana grandeza, Rayados la busca recibir de sus jugadores y técnico, pero mientras no elijan bien a estos, jamás entenderán lo que se necesita, por lo que todo empieza en el escritorio, que al parecer con un buen discurso no les basta y las elecciones de hoy, serán el triunfo o fracaso del mañana. Por ahora Monterrey está ante el mundo, y lo que el mundo ve no creo les guste, ni siquiera en Guadalupe Nuevo León. Nos vemos en el Mundial de Clubes…. ¡Saludos desde el sillón!