El Maratón Powerade Monterrey anunció la semana pasada en sus redes sociales que regresará de manera presencial, tras dos años de llevarse a cabo de manera virtual, debido a la pandemia.
Será el 11 de diciembre del presente año que por fin miles de corredores retomarán las calles de la ciudad y estarán presentes en la línea de salida, para enfrentar esos gloriosos 42 kilómetros con 195 metros.
La modalidad recreativa está confirmada, la elite por confirmarse en las siguientes semanas, y además contará con versión virtual para quienes así lo deseen, esta se celebrará entre el 5 y el 10 diciembre próximos, por esta ocasión el tradicional mini maratón no se llevará a cabo.
Serán seis mil participantes los afortunados que podrán hacerlo de manera presencial, y aunque puede parecer un número grande, la verdad es que no lo es tanto, debido a que 3 mil inscripciones, es decir, la mitad del cupo total, está ya inscrito desde el año 2020, y han venido difiriendo su lugar desde entonces, esperando justo este momento.
El próximo 5 de mayo se darán a conocer por medio de un Facebook Live de su página oficial los pormenores de la convocatoria, costos y demás.
Los organizadores anticiparon que la ruta sufrirá modificaciones, evitando, por ejemplo, el Túnel de la Loma Larga que formó parte del trayecto en las últimas ediciones, buscando hacerlo aún más rápido, y así se puedan generar más récords personales.
Regresa también la entrega del Trofeo Filípides, que se le da a quien se haya distinguido en su trayectoria y/o labor a favor de la promoción del deporte de correr largas distancias, especialmente del maratón, y también el Trofeo Hemerodromos, que es para quienes demuestren que han corrido 100 maratones o más.
Toda esta información que se dio a conocer creo que a muchos corredores nos ha llenado de gran emoción, y nos ha hecho recordar la gran fiesta que es el maratón de casa, y cuánto lo hemos extrañado estos dos últimos años.
Por momentos, me parece increíble que tendremos la oportunidad nuevamente de disfrutar el recorrer las calles de la ciudad, en total libertad, como antes, algo que hace todavía un año se veía complicado.
Somos afortunados en haber llegado hasta aquí y contar con salud para iniciar de nueva cuenta las veinte arduas semanas de entrenamiento para el maratón.
Así que es momento de disfrutar el proceso de prepararse, agradecer el estar aquí y ahora y poder conquistar estos 42 kilómetros una vez más.