Así nada más, sencillamente, 429 millones 257 mil 011 pesos y 82 centavos, cantidad que costará el futuro Hospital General Poniente de Nuevo Laredo.
Lo acaba de anunciar en un viaje más de las decenas de salidas o muchos periplos que lleva Óscar Enrique Rivas Cuéllar en apenas ocho meses y 16 días de gobierno.
Ahora, este viernes 16 de junio, fecha del anuncio oficial, el viajero frecuente, en Ciudad Victoria, se fotografió (no nos pidan que contabilicemos el número de las fotos que lleva publicadas este señor, pues su ego es mucho y muy pocas son nuestras ganas de ponernos a contar tantas impresiones donde aparece Rivas con su cara de “buena onda” y su sonrisa “tan natural”) con la doctora Gloria de Jesús Molina Gamba, directora relevista en la Secretaría de Salud de Tamaulipas.
La foto se intituló “Validación del Proyecto Arquitectónico para la Construcción del Nuevo Hospital General de Nuevo Laredo” (disculpen la repetición de la palabra “nuevo”, pero así son ellos, qué le vamos a hacer, no les alcanza para mejores redactores, ni cabezas más inteligentes).
Se dijo que ella es quien aprueba tal proyecto, del cual sólo se comentó que contará con 120 camas.
Hasta ahí, 120 camas y a erigirse en el norponiente de la ciudad, nada más, no hay más información, así que por favor, no nos pidan más datos y detalles, porque no los proporcionaron, salvo los pesos y centavos a invertir.
(¡Por Dios, claro que nos gustaría saber cómo diablos llegaron a eso de los números finales de 11 pesos y sobre todo a lo de los 82 centavos, de la citada cifra del gran total!)
“Con esta obra, se agilizará la atención médica solucionando así la situación precaria que registran los nosocomios de la ciudad desde hace varios años (sic)”.
Es cuanto refiere la escueta nota tecleada desde la capital del Estado.
Por principio de cuentas, no creemos que con la simple construcción de un nuevo hospital, la situación precaria se vaya a agilizar (aunque mejor debieron haber utilizado la palabra solucionar en lugar de agilizar, ¿verdad estimados lectores?).
SE AHORCAN SOLITOS
En esta ciudad, en materia de salud, por cuanto hace al gobierno estatal -ni hablemos del orden federal- no hay mucho que decir, no positivamente.
Sólo opinamos o somos de la idea, que primero estaría el poner al 100 por ciento al centro de salud, lo mismo que el centro oncológico, igual que al Hospital General ubicado sobre calle Maclovio Herrera y también al Hospital Civil de la colonia Hidalgo.
Todo ello mucho antes de pensar en construir un nuevo nosocomio por parte del gobierno estatal y teniendo como comparsa y en sucia sociedad, al gobierno municipal.
El centro oncológico cuenta o está en una inconclusa primera de tres etapas, que se dijo consistiría.
Ya ni hablemos de los otros edificios de salud pública.
¿No se les hace, estimados lectores, que decir que van a invertir 429 millones de pesos para un nuevo hospital general, en el poniente, es algo equivocado, temerario, fuera de lugar, mal planeado y peor decidido?
A nosotros sí.
Lo peor es que se nos antoja que vaya a ser sólo un desperdicio y robo de tal dinero, pudiendo aplicárselo a lo que ahora se tiene en materia de salud pública estatal, lo ya citado, que está en paupérrimas condiciones.