Se aproxima el “Día D”, el día de votar, la fecha en que todos vamos a cambiar a Tamaulipas y a Nuevo Laredo, así que no nos vayan a salir con la batea de babas de que no van ir a votar porque tienen que ir de shopping al Laredo chicano o porque le dio gripe al perico y lo tienen que cuidar en casa todo el santo día. Son 10 minutos nada más, antes o después de ir a expiar su culpa a la iglesia o al culto.
VENGAN SEÑORES TESTIGOS
Aquí es cuando decimos: “Ojalá que lleguen los simpáticos testigos a levantarlos a todos ese domingo 5 de junio, algo así como con la fresca de las 7:00 de la madrugada”. Eso para que toda la gente esté en pie y acuda temprano a sufragar y se desocupen también muy tempra. Que se haga la visita de Jehová ese domingo de mañanita a cada sacrosanto hogar nuevolaredense.
DURO Y DALE
Estamos friega y jode desde hace algunos días (mucho antes de que empezara el rollo de las campañas y muy previamente a que surgieran los candidotes) con esto de que todos tenemos que votar el citado domingo. Y es que no hay de otra, no hay mañana para el estado y para la ciudad, tenemos que convencer al electorado (como 300 mil cristianos más o menitos) de este pueblo, porque aquí viene la pregunta. ¿Nos gustan los gobiernos que hemos tenido en los últimos cuatro sexenios y nos agrada La Yunta que hemos vivido? Si no es así, ya saben el antídoto.
NO DEBEMOS FALLAR
Señoras, señores, señoritas y mocosos de más de 18 primaveras, en sus manos, mejor dicho en su boleta está el destino de su estado y de su ciudad, así que no vayan a rabonearse su propio futuro. Acuérdense de las duras, para que este día de elecciones, todos como uno solo, busquemos trabajarnos las peras maduras, esas que nos merecemos cada uno. Ya dijimos.
AHORA QUE HAY
Hey racita, ya sábanas, si el día de la votación, alguien les ofrece una lanita por su voto, ustedes agárrenle esa feria, ¡total! Votan por otro chango o mona y sanseacabó la rabia. Al fin y al cabo, créanos que ese dinero es suyo, de ustedes mi querido pueblo, pues es marmaja de sus impuestos, de lo que pagan por su coche, por su predial, por el permiso para la vendimia ambulante, por todo lo que el lidercillo charro les jinca, lo que el gobierno nos recoge (y nos recoge muy seguido).
ATÁSQUENSE QUE HAY LODO
Es pachocha que se la jambaron bien y bonito, sin depositarlas en las arcas del estado o del municipio, por lo que todos debemos entender que de esos regalitos no hay todos los días. Así que ustedes éntrenle con fe a ese money. Son billetes que provienen de su sudada de frente, dinero que fue producto de partirse el lomo trabajando, para luego tener que pagar la luz, o la gasolina, de ahí salen esas “sorjuanitas” o los “Diegos Rivera” y los “Ignacios Zaragoza”. Y sobre ese dinero, si el ciudadano quiere castigar a los corruptos y rateros, pues sólo tiene que votar por otro candidato, distinto al que ellos le digan.
LO BUENO ES QUE…
… Ya vamos a dejarnos de ver en persona y en todos los medios de comunicación a todas esas caras tan repetitivas, de escuchar voces con rollos mareadores. Creemos que todos los candidatos que andan en la bola ya dijeron todo lo que tenían. Ahora que vengan los bailes de cierre de campañas, para eso el pueblo sí se pinta solito. Que venga el jolgorio, a darle vuelo a la hilacha.
NI QUE VALIERAS TANTO
Nada más no se nos arrejunten, una pachanga cada día diferente, para ir a todos los bailongos. Un servidor acudió el domingo a escuchar a El Poder del Norte, en la explanada Independencia, gracias al perredoso y veintiúnico candidote local a la gubernatura, Jorge Valdez Vargas. Ese grupo si me late, de botijones, botudos y sombrerudos. “Perdona si te ofenden mis palabras, pero te juro brotan de mi alma… pero discúlpame mi amor, ni que valieras tanto”.
ALGO ANDA MAL
Que en 147 días han ocurridos 813 choques, o sea ¿sólo 5 y medio por día? (La cifra fue recabada el miércoles 26 de mayo). Y que han muerto 11 prójimos y 171 han resultado lesionados. Se nos antojan para muy poquitos los números. No podemos creer que solamente sean cinco y cachito trancazos de harina (diarios). Alguien está haciendo mal las cuentas. ¿O es que la ciudadanía, como en muchas otras cosas, simplemente no está reportando todo lo que ocurre? Nada raro sería.
11 BORRACHAZOS
Lo que tampoco nos creemos es que sólo 11 conductores jumentos sean sancionados cada fin de semana por andar hasta las manitas. Tal y como si fuera una regla tajante, de solo pepenar a 11 beodos y ahí le paran. ¡Carajo hombre! si en este pueblo tan jacarandoso todo mundo anda bien Pericles. El más abstemio anda hasta el cepillo. Así que a otro perro con ese hueso, los agentes viales no están diciendo todo. No entendemos por qué, pero ya nos imaginamos.
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