El Partido Verde Ecologista de México, PVEM, ha sabido hacerla, más bien, sus dirigentes han sabido hacerla. Desde su nacimiento se caracterizó por alienarse a otros partidos, como el Revolucionario Institucional y Acción Nacional para conseguir votos y mantener el registro.
El hermano pequeño de esos institutos políticos les salió respondón, y tras dar un golpe eficaz al registrar a Vicente Fox como candidato presidencial en aquella Alianza por el Cambio con el PAN obligando a éste a reconocer al guanajuatense, el PRI comenzó a mirarlo con otros ojos.
Esa alianza entre PAN-Verde se debilitó cuando su dirigente, Jorge González Torres no fue incluido en el equipo de Fox, luego su hijo, Emilio González Martínez, nieto de Emilio Martínez Manautou recibe de herencia la dirigencia y de ahí muchas cosas han sucedido relacionadas con corrupción, en el 2004 cuando este personaje negoció la instalación de un hotel en Cancún pidiendo dinero a cambio de dar su apoyo e incluso el posible asesinato de una chica extranjera que cayó del departamento de lujo donde se celebraba una “fiesta salvaje” (The Guardian) del llamado “Niño Verde” localizado en esa ciudad costera y ningún cargo se le fincó al nieto del ex gobernador tamaulipeco.
Su desenvolvimiento es motivo de un análisis en el periódico inglés The Guardian y entre otras cosas le señalan su escaso compromiso con el medio ambiente e incluso su aprobación a la pena de muerte.
Arturo Escobar, representante del Verde en el Congreso rechaza las acusaciones argumenta que Inglaterra no es México y dice que los intelectuales no quieren a su partido porque no lo conocen; me pregunto, ¿no será al contrario? Porque conocen a sus dirigentes es que no los quieren precisamente.
Y admite sin mayor empacho que tampoco les gusta su cercanía con Enrique Peña Nieto y su relación casi simbiótica con Televisa y otras televisoras.
Lo cierto es que el Instituto Nacional Electoral se ha visto lento en dar por terminada la actividad de este partido que ha violado la legislación electoral con sus spots y su reparto de tarjetas que le hubieran valido la pérdida del registro en otro país que se precie de respetar la ley. El INE se ha limitado a dictar sanciones económicas pero la actividad poselitista sigue intocada.
Hay razones para que Peña Nieto se apoye en este partido, que si desapareciera en estos momentos no habría repercusión seria en la vida política del país, le ayudará a tener la mayoría en el Congreso después de las elecciones intermedias.
Y no hay que olvidar que el Verde protege al gobernador “mano fácil” Manuel Velasco y éste es cercano a Peña Nieto. El chiapaneco en su pensamiento feudal cree que podrá llegar a ser presidente de México, dirá que si lo logró el mexiquense, él también puede hacerlo apoyándose en los mismos recursos: Spots televisivos y su relación con una actriz de telenovelas.
Me comenta un funcionario del INE, “yo ya le hubiera quitado el Verde Ecologista el registro”, 96 mil personas comparten esta postura, las que han demandado al INE la anulación del mismo. Pero nada pasa y la elección está a la vuelta de la esquina y pareciera, en este país donde hay cosas que funcionan al revés, que el PVEM saldrá ganando con mayor cantidad de votos y con ello, Peña Nieto asegura cierta tranquilidad para los últimos tres años de su administración, porque en estos momentos crece la campaña para que deje la presidencia debido a los malos resultados obtenidos en su gobierno.
Lo dicho en pueblo de ciegos, el tuerto es rey.
INDEMNIZA IMSS A MÉDICO
Tras permanecer dos meses en plantón frente a Palacio de Gobierno, el médico cirujano José Luis Cantú Sierra recibió la notificación de que el Instituto Mexicano del Seguro Social, que le rescindió el contrato hace 18 años y le inhabilitó por negligencia médica después de la muerte de un paciente “aceptó pagarle dos millones de pesos de salarios caídos, darle capacitación como cirujano y reconocerle las aportaciones al Infonavit y al fondo para el retiro”, dice una nota publicada el domingo por La Jornada y firmada por el corresponsal Martín Sánchez Treviño.
“Para notificarle de la decisión del IMSS acudió Francisco Javier Narváez Quijano, Enrique Saldaña, visitador de Derechos Humanos y la notaria Macarena Martínez Rodríguez, esta aceptación surgió después de que el quejoso anunciara que se amputaría el dedo meñique de la mano derecha,” finalmente al médico se le reconoció la injusticia en su contra, pero tardó 18 años en llegar la justicia.
Gracias a un lector que me hizo llegar la información sobre este caso que muestra que a veces las instituciones mexicanas más o menos funcionan.
Correo electrónico: derrotero@hotmail.com
Twitter: @derrotero_mx
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