¿Sabe qué fenómeno está ocurriendo en las ciudades tamaulipecas donde un número indeterminado de personas fueron desaparecidas por la guerra entre bandas rivales?
Muchas familias están tramitando juicios civiles para declarar muertos a los desaparecidos y así poder hacer uso del dinero de las cuentas bancarias y los bienes materiales de los caídos en la lucha contra, y entre, el crimen organizado.
Pasados cinco años de la desaparición de una persona, se procede a solicitar a las autoridades respectivas la declaración de fallecimiento, para que las familias estén en posibilidades de reclamar sus propiedades en efectivo y en especie.
Los juzgados civiles de Tamaulipas cada día tienen más procesos relacionados con este trámite, lo que podría dar una idea de cuántas personas han desaparecido en la entidad en los últimos años.
De oídas hemos sabido que varios miembros de una sola familia se esfumaron sin dejar rastro.
En ese panorama no hay denuncias de desapariciones, no hay delito que perseguir, la prueba del paso de esas personas por este mundo lo constituye su patrimonio, si es que logró construirlo.
De no ser así, los familiares permanecen en el silencio y el anonimato. Es mejor, dicen, para qué hacer más grande la herida.
Este asunto es parecido a lo que vivió la familia de Muñoz Rocha, que tuvo que solicitar la declaración de fallecimiento del ex priista, lo que en su tiempo fue un hecho muy sonado a nivel nacional.
Hoy sigilosamente los familiares reclaman lo que consideran les pertenece, de ser así pronto veremos esas casas abandonadas que proliferan especialmente en Nuevo Laredo, ocuparse de nueva cuenta.
Las aguas parece que poco a poco vuelven a su nivel.
MUJERES JUNTAS…
Ni difuntas, reza un popular dicho que nos habla sobre los estereotipos que se han construido a través de los años, donde se asegura que las integrantes del género femenino están imposibilitadas, por su propia naturaleza, a crear lazos constructivos entre ellas.
La realización del Segundo Congreso de la Red de Mujeres Periodistas de Tamaulipas celebrado en Reynosa es la muestra de que paso a paso se pueden desarrollar acciones conjuntas para beneficio, no sólo para las que ejercen esta profesión, sino de las tamaulipecas en general.
El encuentro fue exitoso por su asistencia, por los temas tratados, por los compromisos contraídos el año pasado cuando se reunieron por primera vez en Ciudad Victoria y el cumplimiento de los mismos.
Pero también porque la Red de Mujeres Periodistas de esta entidad es de las mejor integradas y organizadas a nivel nacional.
Por ello, el año entrante habrá dos encuentros, uno en el mes de mayo en Tampico, donde se realizará el Tercer Congreso estatal y en noviembre la cita será en Matamoros, con el evento nacional.
A la par de ello, se llevarán a cabo talleres de concienciación para las mujeres en diferentes ciudades del Estado, con el fin de instruir y contribuir a mejorar las condiciones laborales y de vida de las mujeres tamaulipecas.
Lo que empezó hace algunos años con siete mujeres periodistas pioneras en esta organización, entre las que se encuentran Rossy Rodríguez, Dora de la Cruz, Gaby Hernández, Karla Cabrera, hoy es una afortunada realidad. Mil felicidades.
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