Día de Contrastes

Este fin de semana pasó entre protestas y cabalgata. Mientras Geño y Oscar Luebbert estaban montados a caballo recorriendo los 22 kilómetros de la Cabalgata de Las Huastecas, en Reynosa, tierra del alcalde, miles de residentes fronterizos unieron su inconformidad por diversos motivos.

Los manifestantes pidieron entre otros puntos, se redujera el precio del diesel, se retiren los militares y fuerzas federales de las ciudades tamaulipecas y externaron su inconformidad por el aumento a los precios en la importación de vehículos extranjeros.

Esa movilización no ha de haber gustado nadita a Geño, porque mostró la otra cara de la moneda en Tamaulipas, revelándose que aquí no todo es miel sobre hojuelas, como quien dice le amargaron la celebración en las Huastecas.

Así, Tamaulipas tuvo este sábado un día de contrastes. En el norte la inconformidad expresada con la interrupción del tráfico, en el sur la movilización obedeció a un hecho festivo anual que reunió a los gobernadores de Veracruz, Tamaulipas y San Luis Potosí.

Durante la comida del viernes con los equipos de los tres Estados que desarrollan las mesas de trabajo y a la que no asistió Fidel Herrera, Marcelo de los Santos se equivocó en su intervención y llamó a Eugenio licenciado y éste, cuando le tocó el turno, le respondió llamándolo doctor, “para que vea lo que se siente”.

Marcelo de los Santos prácticamente se despidió de las cabalgatas, Eugenio recordó cuando en la primera versión de este evento ecuestre, el gobernador potosino cambió varias veces la fecha de su realización, el motivo era que no sabía montar.

Después de cuatro años de estar realizando estos recorridos por la huasteca, De los Santos resultó más entusiasta y formal que Fidel Herrera, quien siempre ha mostrado cierto desaire, porque o no llega a tiempo, o se retira antes de que termine el evento.

La nota principal de esta cuarta versión de la cabalgata fue el desánimo de los equipos de San Luis Potosí que integraban las tres mesas de trabajo, ¿la razón? Que ya se van de sus cargos, porque pronto habrá elecciones en esa entidad.

Se sintió como el preludio de lo que sucederá el año entrante, si es que hacen la quinta versión de la cabalgata, porque prácticamente Eugenio y su equipo se estarán despidiendo de Tamaulipas.
Sin embargo, en esta cuarta versión, se firmaron convenios y acuerdos, que esperan sean ratificados por sus sucesores.
 
ESTUDIO SOCIOECONÓMICO
En la mesa de seguridad pública, encabezada por los secretarios de gobierno de las tres entidades, Reynaldo Escobar Pérez, de Veracruz, expuso que el 70 por ciento de los policías estatales y municipales veracruzanos no reúnen los requisitos necesarios para formar parte de los cuerpos de seguridad de acuerdo a los parámetros marcados por la federación.

Reconoció que echarlos de las corporaciones representa un problema porque prácticamente los mandan a que se integren a las filas de la delincuencia organizada, como quien dice, los gobiernos estatales y municipales están entre la espada y la pared.

El secretario de Gobierno de San Luis Potosí, por su parte, no quiso aventurarse al mencionar algún porcentaje de policías que no están calificados para el cargo y en el caso de Tamaulipas, Antonio Martínez dijo que están en el proceso de revisión, pero les llevará tiempo porque son nueve mil policías estatales y municipales que tendrán que ser evaluados en cinco áreas.

Martínez Torres expuso que se requiere que la federación avale a Tamaulipas para hacer la evaluación con el fin de agilizar el proceso de selección de los policías en activo.

Indica que si se esperan a que la federación realice el proceso será muy lento y por ello están negociando que de alguna manera se descentralice esa función.

Entre las áreas que se incorporaron y que serán revisadas a los elementos policíacos, además de sus aptitudes físicas y mentales, está el estudio socioeconómico.

O sea, los van a investigar para determinar si sus ingresos como policías, corresponden a su estilo de vida. En este punto, no hay que dejar fuera a los mandos medios y altos de las corporaciones, porque seguro que los evaluadores se encontrarán con cada sorpresa.

Y si su nivel de vida es más alto que los ingresos que perciben, nos preguntamos, ¿serán echados de las corporaciones?

Como vemos, la limpia a fondo de las corporaciones no será tarea sencilla, porque entre la amenaza de ser asesinados por la delincuencia organizada, los bajos sueldos y la posibilidad de ser despedidos, a los policías no les queda mucho margen para cumplir con su responsabilidad.

Reynaldo Escobar, secretario de gobierno veracruzano, por lo menos admite que la situación en el área de seguridad está muy complicada.