Liza (Emily Blunt) es una mujer desesperada. Madre divorciada, con hija adolescente, trabaja como bailarina nudista y quiere cambiar su vida.
Es inteligente y tiene una habilidad natural para las ventas. Por casualidad conoce a Pete (Chris Evans) un ejecutivo farmacéutico cuya trayectoria va a ningún lado.
Sus vidas cambian cuando este la invita a que participe en la promoción de una droga milagrosa para aliviar el dolor del cáncer.
El director David Yates hace una inusual película que inicia como comedia de dos vivales que se aprovechan de las debilidades del sistema legal, para colocar indebidamente un producto que resulta exitoso, y termina como un drama de quienes son sus víctimas y cómo Liza busca redimirse exponiendo toda la verdad, aunque hacerlo implique ir a la cárcel.
La cinta es una interesante exploración del mundo farmacéutico y enseña cómo personas que se aplican bien a conocer las leyes pueden fácilmente romperlas.
Andy García repite, como el dueño de la empresa, el mismo papel que ha hecho en los últimos 20 años, como hombre maduro y apuesto, con barba cana y traje de lino.
Es una cinta muy disfrutable.
(NC-17. No apto para menores de 18)
@LucianoCamposG