El grueso de panistas de Reynosa se quedó en sus casas y no salió a votar para elegir a su candidato presidencial; apenas un 27 por ciento del padrón -entre activos y adherentes- respondió al llamado a las urnas, evidenciando que no hay liderazgo en esta frontera que un día fue gobernada por el PAN.
De un total de 4 mil 800 miembros de ese organismo político, el 73 por ciento no acudió a emitir su voto, dando la espalda a quienes los invitaron a votar por Santiago Creel Miranda, Ernesto Cordero Arroyo o por Josefina Vázquez Mota.
La indiferencia de los albiazules por su contienda interna, también desnudó al principal operador en Tamaulipas de la campaña de Vázquez Mota, el corrupto ex alcalde de Reynosa, Francisco García Cabeza de Vaca.
Porque si en su propia ciudad, la cual gobernó y robó entre 2004 y 2007, apenas pudo movilizar al 27 por ciento de los panistas con derecho a voto, la tendencia a nivel estatal sería igual o peor.
En Reynosa los mismos seguidores de Acción Nacional no olvidan que Cabeza de Vaca los dejó solos y a su propia suerte, cuando el partido perdió la alcaldía en 2007 y él y sus más cercanos colaboradores -cómplices de fechorías- emigraron a la Ciudad de México.
La magra participación que se registró el frío y lluvioso domingo 5 de febrero puso de cuerpo entero al corrupto Cabeza de Vaca, quien se cansó de tocar las puertas de los panistas de Reynosa para que salieran a votar… y un ridículo 27 por ciento accedió a salir a votar.
Ahora viene la elección interna para el Senado donde puede haber sorpresas, con Maki Ortiz de Peña que busca la primera posición en la fórmula.
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