Poco a poco se van develando las incógnitas sobre quiénes serán los candidatos de los diferentes partidos políticos que contenderán en las próximas elecciones federales del primero de julio.
Y aunque los medios de comunicación están inundados con notas, editoriales, análisis, encuestas y predicciones, vale la pena preguntar: ¿a la gente realmente le importa este tema?
Saber si a al ciudadano le interesa o no la política suena como una tarea titánica, complicada, que requeriría del diseño de un complejo sistema de mediciones y monitoreos que dudo alguien pueda realizar.
Por ello pensé en una opción más sencilla: ver en los principales portales de Internet cuáles son las noticias “más leídas” por la gente.
En El Universal se destaca la nota de que el payaso Platanito decidió cancelar varias de sus presentaciones. En Milenio es la reseña del ataque de el grupo Anonymous contra varios portales de Internet del gobierno de Estados Unidos. En Hora Cero lo que más se leyó fue la noticia de la clausura de dos casinos en Nuevo León.
Incluso en Twitter –ese moderno circo romano donde a diario hay una nueva víctima que crucificar–, los “trending topics” (o temas del momento), son Messi, el nuevo disco de los Jonas Brothers y la guerra cibernética.
De hecho, sólo hay un tema relacionado con la política… PRImeromuerto.
Es evidente que al grueso de la población le importa un cacahuate la grilla de los partidos y las patadas por debajo de la mesa que se están dando algunas personas por agenciarse una curul en el Senado o el Congreso de la Unión.
Por eso, cuando encuentro nombres como Francisco García Cabeza de Vaca o Manuel Cavazos Lerma como seguros participantes en el próximo proceso electoral, no me toma mucho razonamiento comprender que (seguramente), el próximo mes de julio el verdadero ganador de las elecciones será (otra vez) el abstencionismo.
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