A quién no lo han sancionado por publicar alguna palabra que se refiera a los gorditos, flaquitos o feitos, pero dichos de manera cruel. Ya saben, verdad, en pleno siglo XXI ya no se puede hacer bullying a “naiden” como se hacía no hace muchos años.
Recuerdo a Memo, un brody de la prepa que se ensañaba por echar carrilla a los demás, quesque tenías una nariz grandotota o unas orejas tipo el elefantito de Disney (ya no sé si puedo escribir su nombre).
Ahora pos que no se te ocurra mencionar siquiera algo relativo al tercer sexo, pos porque eso ya es del pasado. Hasta los “mesmos” comediantes ya dejaron esos chistes, que ya no hacen reír como antes.
Se extraña el humor de Polo Polo, recién fallecido, pero pueden buscarlo en videos de YouTube, creo que en la actualidad tendrían que modificarse algunos de sus chistes porque como que ya no se aplican a las nuevas reglas de la comunidad de las redes sociales.
Pos ya llevo tres semanas castiga’o por el Face, pero el de mi trabajo, solo porque compartí un video de una estación de radio de una autopista de Dallas (y no es albur) porque allá ya he ido con gusto, pero a visitar a mi sobrina del alma Ivett, a Juan y a mi ahijado Eugenio.
Y pos hasta la Rosa María se sorprendió un chorro por la regazón que me aventé, pero pos en esto de la carrera de los medios, a veces se te pasa el avión.
Un mensaje de advertencia me llegó en su momento y me impide publicar en el muro videos, reels simples o hasta posts. O sea que no puedo subir nada nadita de mis visitas frecuentes a la Pulga Hidalgo, que tanto me gusta ir los domingos.
Ya he pedido perdón, he enviado varios emails pero “naiden” me ha respondido, quesque estoy castigado por haber infringido las reglas comunitarias, que es solo por propiedad intelectual, pero también te dan una lista que promueve los valores de autenticidad, seguridad, privacidad y dignidad.
Claro que no se puede promover una conducta delictiva y violencia. La lista incluye violencia e incitación, personas y organizaciones peligrosas, organización de actos dañinos y fomento de actividades delictivas, bienes y servicios restringidos, así como fraude y engaño. Esto nunca lo he hecho.
Se busca también evitar el contenido inaceptable, el lenguaje que incita al odio, contenido gráfico y violento, desnudos y actividad sexual de adultos, como los servicios sexuales. Tampoco me ha pasado por la mente.
Se habla que exista clara libertad de expresión, pero con el pasar de los años, estamos aprendiendo a comunicarnos con mucho respeto, nosotros los que crecimos en el medio de los periódicos, de que sabemos muy bien comunicamos en palabra impresa y nos estamos adaptado a ser más visuales con subir videos y reels a las redes.
Aprendamos de esta experiencia, saber qué se puede y qué no se debe publicar. Como dicen “no por mucho madrugar amanece más temprano”. Estamos madurando para comunicarnos “más mejor”. Sean felices.