La escala en los ataques a policías y funcionarios de gobierno de los tres niveles sigue a la alza, eso se confirma con lo ocurrido a la escolta del gobernador de Chihuahua que, aunque fue aclarado por el propio José Reyes Baeza, no deja de causar inquietud.
El mandatario chihuahuense salió luego al paso de las especulaciones diciendo que iba en el convoy cuando mataron al escolta, pero que el ataque no era contra él, la procuradora estatal intentó atribuirlo a un incidente vial, pero corren versiones distintas.
El tiroteo ocurrió después de que un jefe de policía en Chihuahua decide renunciar para evitar se haga efectiva la amenaza de matar a sus subalternos.
Desde que comenzó la guerra entre bandas rivales, a la que entró después la policía federal y luego el ejército, el nivel de las víctimas de los ataques es cada día más alto.
Ya mataron jefes de policía tanto municipales como estatales, regidores, funcionarios de gobierno de tercer nivel, en Tamaulipas sabemos muy bien de eso.
Tamaulipas es una de las entidades que más víctimas ha aportado desde hace varios años a esta lucha que obligó a salir a los militares de los cuarteles.
Y pareciera que no hay solución efectiva a corto plazo.
En Chihuahua es donde está el campo de batalla entre policías, ejército y delincuencia organizada, pero otros Estados no escapan a ese clima de tensión.
En tanto aquí en Tamaulipas el secretario de Gobierno, Antonio Martínez Torres, dice que no solicitarán el reforzamiento de la vigilancia para funcionarios.
Y como el horno no está para bollos y después de lo sucedido en Reynosa donde la balacera ocurrida la semana pasada dejó varios muertos, la Diócesis de Ciudad Victoria será escenario de un evento que se repetirá cada domingo a las 12 del día.
El obispo Antonio González Sánchez les adelantó a los representantes de los medios de comunicación la decisión acordada para que los 33 templos de la Diócesis de Ciudad Victoria se unan en una jornada de oración y de repicar de campañas para manifestar pacíficamente su repudio a la violencia.
Así que el domingo usted escuchará el repicar de las campañas y sabrá que la iglesia católica y sus feligreses están orando para que termine la ola de violencia que afecta a México y a Tamaulipas.
Como dice el párroco la solución no es combatir la violencia con violencia. La solución es que cada autoridad asuma la responsabilidad que le corresponde en este grave problema de inseguridad y que actúen en consecuencia.
Como hemos insistido tantas veces, nuestro problema radica en la corrupción y la impunidad.
Mientras no haya castigo para quienes cometen delitos, sea del orden que sea, la situación no mejorará.
Y seguiremos viendo como la escala de asesinatos sube de nivel y, como van las cosas, lo que sigue es un mandatario estatal.
Para concluir la frase de Mafalda queda perfecta también en esta ocasión: “¡Paren el mundo, me quiero bajar!”
BUENOS CONTACTOS
Debe tener Mercedes del Carmen Guillén Vicente, Paloma, para que ayer en medios nacionales se diera a conocer que irá en la lista de candidatos a las pluris. Lo que no aclararon las notas y columnas políticas es qué lugar ocupará la ex procuradora en ese listado, acordémonos, entre más arriba, mayores posibilidades de llegar a sentarse a una curul.
Ese es el motivo que más de cinco en Tamaulipas no concilien el sueño, ellos y ellas sueñan con números y entre menor denominación tengan mejor.
La verdad qué horrible será estar en sus zapatos, porque, mire, han de pensar: qué tanto me quieren, qué tanto reconocen mi esfuerzo a favor del partido y Tamaulipas. Les ha de entrar una inseguridad…
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