El director y guionista Alex Garland reconsidera lo que se sabía de películas de periodistas en zonas de conflicto con este trepidante drama ubicado en un futuro distópico en Estados Unidos, donde la guerrilla ha dividido al país, controlándolo, y el Presidente atrincherado en la Casa Blanca solo espera que vayan por él para ser ajusticiado.
En este contexto, un grupo de fotoperiodistas encabezados por la fría e inexpresiva Lee (Kisten Dunst), veterana del oficio, se dirige a la Capital del país pero deben sortear numerosos peligros, entre milicianos que desprecian la vida y carreteras donde ya no existe la ley.
La película da una idea sobre cómo se vería el país desordenado y sin liderazgo político y legal. En esta sociedad caótica, en la que se impone la fuerza de las balas, es indispensable que los periodistas digan qué está pasando.
Uno de los grandes aciertos técnicos de la película es la fotografía, que hace que cada toma parezca, precisamente, un fotograma tomado por la cámara de un periodista de la lente.
Excelente y angustiosa.
(NC-17. No apto para menores de 18)
@LucianoCamposG