Visto está que las balaceras son sin fin, con la novedad de que ahora hasta los policías ministeriales son víctimas de la violencia que aletea sobre Reynosa, ignoro si a éstos los tirotearon en cumplimiento de una orden de captura o por un circunstancial topón.
Pero sea cuál sea la causa esto ya parece insoluble y a los ciudadanos no nos queda más que la cristiana resignación, redoblando la cautela, pues tampoco es cosa de salir a la calle con solamente el rezo como escudo.
Pero hay vienen las campañas y a ver que nos dicen de ese tema, lo mismo los candidatos presidenciales que a la alcaldía, porque el problema es de todos aunque cada quien dentro de su competencia.
Sólo que, en ningún nivel de gobierno se debe evadir hablar de ese tema que cuando lo hagan los candidatos locales estará en desventaja Maki Ortiz, por ser gobernante a nivel municipal y porque pretende la reelección.
Ahora bien, combatir el delito no es competencia de la autoridad municipal, pero sí le corresponde prevenirlo y si los delitos persisten es obvio que la prevención está fallando.
Por lo que en este caso no resulta aplicable la analogía de cuál fue primero: el huevo, o la gallina?, en virtud de que la inseguridad nace por falta de prevención y crece por no combatirla.
En síntesis, los candidatos a la presidencia municipal van a tener que hablar con los votantes de ese espinoso tema, la alcaldesa estará en desventaja por obvias razones y las excusas no para todos serán paliativos y por ende no todos le refrendarán el voto.
Por ello formo parte de los que consideran que en México aún no hay circunstancias para la reelección, los presupuestos municipales son insuficientes y por ende los alcaldes no con todos quedan bien, sobre todo en la seguridad, que en ese rubro con todos han fallado, se han limitado a escuchar silbar los balazos, pero no con un rosario en las manos, sino en medio de vehículos blindados y de escoltas.
Que tengan un buen inicio de lo que será un largo fin de semana. Va estar nubladito y ante la inminencia de la Semana Santa seguro no habrá éxodo, lo que presagia atiborramientos en los Centros de Salud aún sin el gancho del futbol, los juramentados con ese deporte ya andan sumidos en la depresión tras ver cómo los equipos de la liga gringa les pasaron por arriba a los de la rascuache liga mexicana de soccer, esa es la realidad futbolera de por aquí, pero es lo que tienen, confórmense y disfrútenlo.