Queremos sumarnos a las múltiples felicitaciones que recibió la politóloga y académica del ITAM, Denisse Dresser, con ese discurso que ya marcó historia en el marco de la asamblea del foro organizado por el Congreso de la Unión en la Ciudad de México de cómo enfrentar en México la crisis, un discurso que pudo dar en el clavo de lo que vivimos todos los mexicanos, que es un régimen económico donde hay una oligarquía que maneja las finanzas publicas de manera discrecional y donde solamente unos cuantos tienen el monopolio del poder económico, donde no hay una libre competencia e igualdad de oportunidades para todos los mexicanos, habló en concreto del aeropuerto más caro, habló de la manera en como un sindicato de manera unilateral se decretó un aumento del 30 por ciento que son los taxis que están fuera del aeropuerto, habló de dos televisoras que tienen el control de los medios masivos de comunicación, habló de que solamente existe una línea telefónica que es Telmex, habló que solamente podemos tener servicios de gasolineras concesionadas por Petróleos Mexicanos y así nos habló de que la economía es manejada por unos cuantos en el país y la mayoría de los mexicanos seguimos atorados en la mayoría de los trámites que tenemos que hacer.
El Foro Económico de Davos, Suiza, dio en sus últimos número que México ocupa el lugar número 111 de 122 países de la cantidad de trámites en la burocracia que tenemos que hacer todo el tiempo hasta que nos asfixia los trámites que tenemos que hacer en la administración pública lo que nos impide un desarrollo natural y rápido de los emprendedores que quieren generar empleo en el país además de que no hay que olvidar que los pequeños y medianos productores generan el 75 por ciento de los empleos en el país.
Felicitamos a la doctora Denisse Dresser por ese discurso, que al igual que discursos como el que dio Belisario Domínguez cuando el usurpador Victoriano Huerta asesinó a Madero y Pino Suárez y el discurso maravilloso de Manuel J. Clouhtier en 1988 quien dijo “vengo no a que creas en mi sueño, sino a que creas en tu sueños”, así cantidad de discursos que han marcado la mentalidad y los comportamientos de los pueblos. Ese discurso tiene esa categoría, es un discurso que dió en el clavo de lo que todos mexicanos estamos viviendo día a día, esa oferta y demanda ficticia, cuando en realidad es una economía que está siendo manejada por la burocracia y los altos intereses que hay en el país que no quieren que exista más competencia, no es posible que estemos en últimos lugares en competitividad, casi el número 60 en términos de bienestar y calidad de vida de las familias, no podemos seguir en los parámetros mundiales con unas cifras muy por debajo de las expectativas de lo que podemos generar los mexicanos que somos un pueblo trabajador pero que siempre se encuentra con la barrera de la burocracia.
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