Más de dos reporteros se sorprendieron con la actitud que asumió el secretario general del PAN, Rolando González Tejeda, la mañana –del 14 de agosto– en que vino a Reynosa para disolver el Comité Municipal de su partido y retirar de la dirigencia a Raúl García Vivián.
González Tejeda fue parco y hostil con los medios de comunicación con quienes, incluso, protagonizó un conato de zafarrancho al negarse a hacer declaraciones sobre su sorpresiva presencia en Reynosa.
Ante los cuestionamientos de los reporteros, el segundo hombre en la dirigencia estatal de Acción Nacional prefirió ‘atrincherarse’ que ofrecer una explicación institucional sobre las medidas adoptadas por su partido.
A todos los reporteros les llamó la atención que mientras el propio Raúl García Vivián diera la cara para anunciar su destitución, el enviado de Javier Garza de Coss se mantuviera bajo resguardo y se negara a notificar oficialmente la disolución del Comité Municipal, que no es asunto menor.
Obviamente la negativa de González Tejeda propició especulaciones varias.
Dos fueron las más frecuentes: que Rolando es un estratega interno puro, pero no es un hombre de medios y la otra, que el partido regresaba a su filosofía de tratar sus asuntos internos, en lo interno.
Ambas siempre sonaron a justificación pueril.
¿De qué manera puede afectar esto al PAN como institución? no sé; pero por lo pronto una nueva controversia desatará sobre los azules si se confirma la versión que ha soltado el ex dirigente Raúl García Vivián.
El viernes anterior, durante una entrevista para la radio, García Vivián reveló que, ésa mañana de su destitución, en su encuentro privado, Rolando González Tejeda le aseguró que venía a cumplir con una encomienda del Comité Directivo Estatal con la que él (González Tejeda) no estaba de acuerdo.
–Me dijo que había conversado con Garza de Coss y le había hecho ver lo inconveniente de desaparecer el Comité Municipal de Reynosa, dijo Raúl García Vivián.
Y añadió:
–Incluso, me aseguró que él (González Tejeda) había votado en contra de ésta decisión pero que Javier Garza de Coss había insistido.
El ex dirigente panista en Reynosa, que hoy está luchando por ser reinstalado en su puesto, reveló además que, ni Rolando González Tejeda ni ningún otro directivo, le ha notificado cuáles fueron los motivos para su destitución.
¿Y saben qué es lo más delicado?
Que el propio Javier Garza de Coss reconoció, el mismo viernes por la tarde, que no sabe si el señor González Tejeda le informó a García Vivián sobre los motivos de su remoción.
Lo grave en este asunto, más allá de la desaparición del Comité Municipal ó la remoción de García Vivián es que han pasado varios días de esta revelación sin que el Comité Directivo Estatal haya desmentido la versión ‘vivianista’ sobre la actitud de González Tejeda.
Qué grave sería para el PAN que el segundo hombre en importancia en la estructura panista trabajara en sentido contrario al líder.
Todo el mar de especulaciones no hubiera sobrevenido si aquélla mañana Rolando González Tejeda, se hubiera detenido a informar con toda tranquilidad sobre el acontecimiento.
Con oficializar públicamente lo que se decidió en privado le hubiera bastado.
Pero no…
EL FINAL
En el arranque de su segundo período de sesiones los diputados locales tienen un gran reto; las cuentas públicas de Reynosa los están esperando.
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