El Ayuntamiento de Altamira anuncia una medida interesante, que se sancionará a los empleados públicos que hagan publicaciones en las redes sociales incluso desde su celular.
Aunque la nota del periódico Expreso no determina si el usar las redes sociales en horas de trabajo está prohibido, supongo que por ahí va el asunto.
El uso de las herramientas tecnológicas durante el tiempo de oficina es uno de los aspectos más difíciles de controlar debido a que prácticamente todas las personas traen un teléfono que les permite conectarse a Internet.
El punto es que muchas de esas personas se la pasan subiendo fotografías y textos incluso cuando están en horas de servicio, lo cual no es muy del agrado de las autoridades municipales altamirenses.
La idea con el reglamento interno de Gobierno Inteligente y Tecnologías de la Información presentado el lunes incluye también restringir el uso de la red abierta de Internet y el bloqueo de las páginas de redes sociales.
Cuando aún no existía ni Facebook, ni Twitter, usábamos el messenger y muchas veces escuché decir que restringirían el servicio en las oficinas gubernamentales, cosa que nunca ocurrió.
Por lo pronto habrá que ver cómo le harán para darle seguimiento a todas las páginas de los empleados de Altamira para comprobar que andan subiendo selfies a la hora del trabajo.
Y también se tendría que verificar si esta intrusión no es violatoria de la privacidad de las personas.
Prohibir el uso de las redes sociales es una batalla perdida, aquí se requiere concientización y responsabilidad de parte de los empleados para que se dediquen en horas hábiles a trabajar, no a producir material para sus páginas de Facebook y para andar subiendo comentarios a Twitter.
Desde ahora le pronostico a las autoridades altamirenses que se toparán con pared, no sera fácil primero seguir las publicaciones de sus empleados y menos descontarles un día de salario.
LA BAJAN
La cumbre iberoamericana que se celebra en Veracruz tuvo una ausencia, no se hizo la reunión de primeras damas, porque Angélica Rivera trae bajos puntos no solo al interior del país, sino hacia el extranjero, según una nota del periódico español El Mundo.
Mientras aquí se trata de disimular lo que la esposa de Enrique Peña Nieto ocasionó con su salida a “regañar” a los mexicanos por la compra de su costosísima residencia, y hasta la propia Rosario Robles, secretaria de Desarrollo Social se atreve a pedir que respeten a Rivera, los internautas han creado críticas severas al comportamiento de quien tendría que ser ejemplo de honestidad junto con su esposo y el equipo que acompaña a éste.
En una nota publicada en el periódico español se señala el recorte del vuelo a la Gaviota, haciendo alusión a su sobrenombre telenovelero, detallan que la reunión de primeras damas de la que Rivera sería la anfitriona hubo de cancelarse, porque el horno no está para bollos.
Angélica Rivera iba a tener su primera oportunidad de ser anfitriona por todo lo alto para las primeras damas que acompañan a los dirigentes asistentes a la cumbre, pero no pudo ser.
Lo que sí fue es el discurso de Peña Nieto elogiando a Televisa en una cena organizada por el dueño de esa empresa, Emilio Azcárraga.
Ésas son las historias que salen de las reuniones entre mandatarios que le cuestan un buen dinero a la ciudadanía y que no se traducen en beneficios colectivos.
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